Los vecinos del centro denuncian la ocupación en la vía pública de las fruterías
Las quejas vienen dadas por la suciedad que se origina en la calle y por la difícil accesibilidad
Un grupo de vecinos del centro de Tarragona se queja, a través de las redes sociales, de laocupación de la vía pública por parte de los puestosde algunas fruterías. Los vecinos ponen en duda los permisos de estas paradaspor parte del Ayuntamiento, a pesar de que, según ha podido comprobar el DiariMés, la mayoría de estas fruterías tienen licencia para sacar los mostradores al exterior. Aun así, los vecinos aseguran que si el Ayuntamiento ha dado las licencias en estos establecimientos, «no ha calculado bien el espacio de las aceras, porque la mayoría de stands no permiten el paso a los peatones», asegura Emili Rivelles, vecino y líder de la formación políticaAraTarragona. Además, «traen suciedad y dan una mala imagen en las calles de la ciudad», explica Rivelles.
Estas fruterías con mostradores que ocupan la vía pública se pueden encontrar en la calle Ramon i Cajal, en la plaza Ponent, en la calle Pare Palau y en la calle Reding, entre otros. Los vecinos se quejan de la suciedad que generan con las cajas de fruta y verdura y también del difícil acceso a las aceras. Algunos de los vecinos aseguran que las personas que van con sillas de ruedas no pueden acceder a los comercios de los alrededores de la frutería de la plaza Ponent, por culpa del puesto, que ocupa casi media acera.
«Pedimos a la Guardia Urbana y al Ayuntamiento que se pongan manos a la obra con este tema y regularicen la utilización de la vía pública», explica Rivelles.
Por su parte, Ben Lahcen Abdelguhni, propietario de las fruterías Nadia –situadas en la plaza Ponent y en la calle Reding-, tiene permiso de ocupación de la vía pública y, además, asegura que un arquitecto del Ayuntamiento ha sido el encargado de gestionar el espacio exterior. Abdelguhni confiesa que hace unos meses la Guardia Urbana lo multaron para tener cajas a fuera, pero «desde entonces que no las sacamos y lo tenemos todo muy limpioy también respetamos las normas de convivencia», explica. El propietario de las fruterías añade que «habitualmente pasa la Guardia Urbana y nos pide las licencias».
Trabajar para la estética
La consejerade Comercio, Elvira Ferrando, destaca la importancia de homogeneizar los criterios a la hora de poner paradasen la vía pública, con el fin de garantizar la estética y la buena imagen de las calles más comerciales de la ciudad. «En septiembre empezaré a reunirme con todos ellos», asegura la consejera. Por su parte, Florenci Nieto, presidente de PIMEC, opina que «aunque tengan permiso se tiene que mirar porel interés común de ciudadanos y comerciantes. Nieto asegura que se quiere reunir con los principales implicados, para defender los intereses de sus representantes.