Ballesteros apuesta por «reformular» al PSC y se descarta para liderarlo

El alcalde de Tarragona, el socialista Josep Fèlix Ballesteros, no optará a liderar al PSC en el congreso que tiene previsto celebrar el partido el próximo mes de octubre. Así lo ha asegurado durante una entrevista con el ACN en la que ha dejado claro que apuesta por una «reformulación» de los principios del socialismo y una renovación en profundidad del partido. «Se renovará seguro, será un congreso muy importante y de lo que se hablará antes y después», ha manifestado Ballesteros. El dirigente socialista se ha descartado, sin embargo, para liderar este partido, encabezado actualmente por Miquel Iceta y, porel momento, único candidato anteel nuevo congreso. «Hace tiempo que digo que mi única prioridad en política es la alcaldía y Tarragona. No me presentaré para dirigir al PSC en primera línea ni como primer secretario», ha afirmado con contundencia, a pesar de estar dispuesto a formar parte de la nueva ejecutiva que surja en el congreso.

Sin querer posicionar sobre posibles candidatos a dirigir al PSC, Ballesteros ha asegurado que «pase lo que pase» habrá renovación. El alcalde tarraconense ha destacado que el grupo parlamentario se ha renovado en prácticamente un 80%, las candidaturas municipales también y que, por lo tanto, se reflejará en la ejecutiva. «El partido no puede no renovarse en profundidad. Necesitamos reflexionar sobre cómo conectar mejor con el conjunto de la sociedad. Tenemos un partido que está pensado de hace 37 años y que ha dado mucho servicio a la sociedad, pero ahora son nuevos tiempos y tenemos que contactar con la gente de manera diferente también», ha añadido.

A pesar de apostar por esta reformulación, Ballesteros ha dejado claro que no hay que cambiar el nombre, como han hecho desde Convergencia. «No tenemos que esconder las siglas ni nos tenemos que avergonzar. Creo que nos podemos seguir llamando así, cambiando nuestras fórmulas organizativas y participativas», ha lanzado.

El debate de investidura

Ballesteros también ha analizado las negociaciones parael debate de investidura a las elecciones españolas y, a pesar de considerar que no hay argumentos para cambiar la posición del PSOE, cree que el riesgo de unas terceras elecciones pueden facilitar algún tipo de acuerdo. «Entiendo que Pedro Sánchez está haciendo lo que toca, pero también es verdad que nadie quiere elecciones de nuevo y eso puede hacer que finalmente pueda acabar habiendo algún acuerdo, o bien para hacer gobierno, o gobiernos alternativos buscando fórmulas diferentes», ha manifestado.

Aunque el alcalde hace un balance muy positivo de su pacto de gobierno con el PP al Ayuntamiento de Tarragona, deja claro que el acuerdo no es extrapolable más allá de la ciudad. «Ahora mismo me es difícil ver una abstención del PSOE y más todavía una gran coalición», ha añadido. Con todo, apunta que una retirada del líder popular Mariano Rajoy de delante podría mejorar el bloqueo actual.

El acto de laANC en Tarragona

Ballesteros también ha valorado el acto descentralizado que la Asamblea nacional Catalana (ANC) hará en Tarragona para la Festividad del Once de Septiembre. «Nos han pedido permisos y se los hemos concedido. Mi respeto total y absoluto por el acto, defiendo la libertad de expresión de cualquier persona, piense como piense, haga lo que haga, siempre que sea democrático,» ha manifestado.

Respecto de la posición de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que ha asegurado que este año participará, el alcalde tarraconense ha expresado su sorpresa sobre la diferencia entre el año pasado y este. «No lo veo ni bien ni mal, pero me pregunto qué ha cambiado del año pasado en este porqué haya decidido ir ahora», ha razonado.

Por último, y ante la cuestión de confianza que afrontará al presidente Carles Puigdemont a finales de septiembre, Ballesteros cree que saldrá adelante, pero que no irá más allá. De hecho, sobre el momento que afronta el proceso hacia la independencia, el dirigente socialista asegura que hay cierta sensación de «vivir el día de la marmota», y lamenta que mientras se discute de las mismas propuestas durante meses los problemas del país continúan. «El país real es el que la gente sufre porla vivienda, porel paro, porla salud ypor los servicios sociales. Para mí es prioritario que no se rompa la convivencia y que haya igualdad de oportunidades», ha concluido.