«En un día, puedes tener sol, nube, lluvia e, incluso, nieve»

El espíritu aventurero del almosterenca a Marta Pino lo ha llevado hasta Bélgica, a la ciudad Liège. Hace casi un año que como estudiante de Psicología está cursando un master en Management enHEC-Liège (ULg).

—Cómo fue su primera impresión?

—Desde el primer momento ya noté que estaría bien. Aquello que más me sorprendió fue su gente, todos ellos muy amables y gentiles.

—Cuáles son las principales diferencias?

—El cambio más brusco es el tiempo. Mientras que los inviernos en Cataluña son cálidos en Bélgica hace muy frío y también llueve mucho. A partir de octubre ya empezó a hacer frío y cada vez el termómetro tiraba más abajo. El hecho más curioso es que, en un mismo día, puedes tener momentos de sol, nube, lluvia, granizo e, incluso, nieve. Ahora bien, eso no impide a los liégeoises salir o que vayan a tomar una cerveza a una terraza de algún bar, bien acondicionado, claro está. Respecto a los horarios y hábitos alimenticios, también podemos encontrar diferencias con Cataluña ya que siguen las costumbres europeas.

—Los lugares más destacados?

—Liège me sorprendió muy positivamente. Antes de ir no había oído hablar nunca. También es conocida como la cité ardente y, desde el primer momento, ya entendí por qué. Su gente, el ambiente y su centro histórico. Todo es muy cálido y te hace sentir como en casa. ¡Tiene mucho encanto! La ciudad tiene rincones preciosos llenos de historia. Mi lugar preferido es la zona de Le Coteaux de la Citadelle, ya que es una zona verde donde tienes Liège a tus pies y donde la calma predomina. Además, de Liège son famosos sus Gofres: Gaufre de Liège. ¡Buenísimos!

—Cómo se está viviendo la crisis?

—La crisis aquí no se nota tanto como en España. Los trabajos más abundantes son, sobre todo, trabajos para estudiantes y encontrar un trabajo con un buen salario no es demasiado complicado si se tienen los estudios requeridos.

—Le ha pasado algún hecho curioso?

—Desde que llegué todo ha ido rodado, esta experiencia me ha permitido poder conocer gente fantástica, tanto belga como de otras partes de todo el mundo. Cada día es una aventura que sabes cómo empieza pero nunca como|cómo acaba. Liège esta perfectamente posicionada en el mapa, es muy fácil viajar. Al encontrarse en el corazón|coro de Europa en poco tiempo estás en Holanda, Alemania, Francia, Luxemburgo o en la otra punta de país. Una de las vivencias que más me ha gustado fue cuando, el noviembre pasado, pude asistir a un acontecimiento de la ciudad (recomendable al 100%) conocido comoLa nocturne desCoteaux, en el cual ponen miles de velas por todo el casco antiguo, acompañándolo con música y pirotecnia. Es mágico.

—Qué costumbre se llevaría?

—Si pudiera, me lo llevaría todo hacia casa! Sobre todo la comida típica: chocolate, gofres, cerveza y frites! También me llevaría los mercadillosde Navidad, son preciosos.

—Qué es lo que más echa de menos?

—Claramente el sol, la playa y el buen tiempo. No te das cuenta de cómo lo necesitas hasta que no lo pierdes. ¡Al final, el frío, la lluvia y el gris del cielo acaban siendo duros! La gente sale a comer a los parques cuando hay un pequeño rayo de sol.