Los voluntarios de los Juegos Mediterráneos también son internacionales
Tres de los colaboradores proceden de Orán y hace menos de dos años que viven en Tarragona
«Si hace falta, seré la persona que irá a recoger las pelotas de tenis que se escapan durante los partidos». Así de convencido y con mucho humor, el joven Nicolas Kone muestra las ganas que tiene de participar en los Juegos Mediterráneos del 2017 como voluntario. En su lado también está Hicham Elghodasse i Naima Mimoun. Los tres comparten unas mismas peculiaridades: proceden de Orán, Argelia, hace menos de dos años que viven en Tarragona y formarán parte del equipo de voluntarios.
Aunque todavía no se ha definido cuál será la tarea exacta que desarrollarán, Hicham Elghodasse –de 24 años– explica que «hablamos francés, árabe y español. De manera que, sobre todo, nos interesa entrar en la sección de traducción o de protocolo, aunque haremos todo lo que nos pidan». Este hace casi dos años que vive en la ciudad, ya que está formándose en estudios de sistemas electrotécnicos, mientras que los otros dos llevan menos tiempo y están cursando estudios de Administración y Finanzas.
Por su parte, Naima Mimoun destaca que «decidí apuntarme como voluntaria para ayudar y conocer gente». Además, considera que «los Juegos servirán para dar más visibilidad en la ciudad. Todo el mundo conoce Barcelona y hay que mejorar la imagen y la notoriedad de Tarragona, ya que tiene grandes riquezas».
A la vez, detalla que, en comparación con su país, «aquí puedo ir a correr sin ningún problema, en Argelia todavía cuesta. Ahora empieza a haber la posibilidad de que alguna chica vaya a correr en campos cerrados». Más allá de las diferencias entre países, los voluntarios también coinciden en destacar la «belleza» de la demarcación. Elghodasse explica que «no sabía que teníais una provincia tan bonita. Hemos conocido la Mussara, Siurana y el Salt de la Reina Mora. Me encanta». Asimismo, Nicolas Kone –de 27 años– asegura que «prefiero la tranquilidad de Tarragona, antes que Barcelona. Es una ciudad donde podéis hacer de todo y es bastante abierta».
Por otra parte, el concejal de los Juegos Mediterráneos, Javier Villamayor, celebra «la posibilidad de contar con jóvenes que ya se han adaptado a Tarragona y que cuentan con un gran nivel académico». Además, detalla que «de los más de 5.200 voluntarios que tenemos, hay que son de Francia, Italia y Rusia, pero también de Agèria y de la antigua Yugoslavia». De hecho, Oró, la ciudad de estos tres voluntarios será la localidad que reunirá los siguientes Juegos Mediterráneos, el año 2021.