El Síndic defiende el derecho a descanso de los vecinos de la Parte Alta
Recomienda al Ayuntamiento que informe de las actuaciones concretas a los vecinos y analice su impacto acústico
El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha emitido una resolución en que defiende el derecho a descanso de los vecinos de la Parte Alta de Tarragona, que sufren molestias acústicas ocasionadas por actividades nocturnas de carácter festivo durante las fiestas mayores de Santa Tecla y de Sant Magí. Esta resolución se emite en respuesta a la exposición de la problemática que los afectados hicieron al Síndico mediante la queja de una vecina afectada, miembro de la asociaciónFarts de Soroll, la cual juntó 230 firmas de soporte. El problema que expusieron es que durante las fiestas mayores la mayoría de actos se concentran en calles habitadas de la Parte Alta, al aire libre y con elevado volumen de ruido, sobre todo durante las noches.
Siguiendo el mismo criterio expuestoenel Informe sobre ocio nocturno y convivencia ciudadana, presentadoenjunio de 2016 anteel Parlament de Catalunya, el Síndico considera que es legítimo tanto querer disfrutar de las fiestas mayores como querer descansar en el domicilio sin interferencias, derechos que tiene que intentar compatibilizar el Ayuntamiento. En este sentido, Rafael Ribó ha recomendado al consistorio tarraconense que analice el impacto acústico de las actividades extraordinarias que autorice en la zona y que informe de las actuaciones concretas que se lleven a cabo para minimizar las molestias a los vecinos.
El Ayuntamiento previamente ya había explicado al Síndico que estabatrabajando en posibles medidas como la limitación horaria de las actividades y la supervisión de la Guardia Urbana a fin de que se cumplieran los horarios. También explicó que estaban estudiando la posibilidad de redistribuir las actividades en otras zonas de la ciudad de forma progresiva. En este sentido, se planteaban reunirse con los organizadores de los actos peracordar el volumen de los altavoces y la ubicación.
Por otra parte, el Informe también destaca que el derecho al medio ambiente adecuado implica el derecho a vivir sin ruidos. Para cumplir con esteello, considera que la Administración tiene que adoptar un papel más activo y contundente. Hace falta que lleve a cabo una inspección continuada y eficaz por detectar los focos problemáticos con agilidad y para que las molestias no se conviertan en crónicas. También recomienda que se adopten medidas que no impliquen únicamente sancionar.