«Londres necesita gente de fuera para ser una ciudad pionera mundialmente»

Las oportunidades que ofrece Londres en el sector tecnológico empujaron a Anton Òdena a marcharse hace dos años. Allí trabaja en el departamento digital de Canon, haciendo desarrollo de aplicaciones. El reusense confiesa que al principio fue una aventura y destaca los cambios que implica vivir en una gran ciudad.

—¿Qué motivos lo llevaron a marcharse a Londres?

—Acabé mis estudios y quería emprender un proyecto con un compañero que ya vivía aquí. Así que vine, abrí una pequeña empresa y ahora hago un poco de todo aquí.

—¿Cuál fue la primera impresión al llegar?

—Cuando llegué no entendía nada. Mi inglés era cero e iba muy perdido. La gente te intenta ayudar si preguntas por la calle o por el metro. Aun así, mi impresión fue la de una ciudad muy grande. Estás allí en medio y te preguntas qué haces.

—¿Fueron unos días complicados?

—Mucho. Tenía que encontrar un lugarpara estar y para dormir. Siempre comprueban el dinero que tienes y todavía no tenía una cuenta bancaria. Entonces, tienes que hacerlo como sea para encontrar un sitio donde no te pidan nada. Si vienescon un contrato de trabajo, es mucho mejor, pero si vienesa la aventura, como hice yo, es más complicado.

—¿Le sorprendióel cambio?

—La calidad de vida que tienes en Reus es muy diferente de la de aquí. En Reus lo tienes todo a cinco minutos caminando y aquí lo tienes todo a media hora en metro. Esta es una de las cosas que ya sabes cuando vas a una gran ciudad. Pero Londres está llena de oportunidades que no creo que estén en Reus.

—¿Cuáles son las principales diferencias?

—Con respecto al trabajo, en el sector en el cual estoy hay mucha flexibilidad horaria y está muy bien. Por otra parte, el tiempo es una porquería. Es totalmente imprevisible. Puede llover, hacer sol, viento. Eso hace que no estés tanto en la calle y que no puedas planear tanto las cosas. La otra principal diferencia es la comida. La gente no tiene la costumbre de comeren casa y cocinar. En Londres se va más deprisa y en Cataluña, más calmado. Aparte, los pisos son mucho más pequeños y muy caros.

—¿Qué lugares recomienda?

—Trabajo en Shoreditch y me encanta. Hace unos años este barrio era un desastre, pero está al lado de la City y ahora puedes encontrarte un rascacielos y una antigua nave industrial reformada con oficinas. Es muy hipster underground. Al lado de Tower Bridge hay un puerto que se llama St Katharine Docks. Está en medio de Londres, pero queda aislado como si fuera un pueblecito, y parece que estés en otro lugar.

—¿Cómo se está viviendo la crisis?

—En la City no hay crisis o yo no la veo. Se tiene que decir que no he salido muchofuera y que Londres es una ciudad financiera donde hay mucho movimiento.

—¿Es diferente al resto del país?

—Sí, es como con el Brexit. Londres no quería marcharse. Al final la ciudad es como una isla y necesita gente que venga de fuera si quiere ser una pionera a nivel mundial.

—¿Es un buen lugar para que los más jóvenes puedan encontrar trabajo?

—Tienes que saber en qué sector estás y qué necesidades hay. En mi caso, trabajando en el sector tecnológico, no encontraría las mismas oportunidades en Cataluña que en Londres.

—¿Qué costumbre se llevaría aCataluña?

—Sólo me llevaría la manera de trabajar y los horarios. Aquí no se para dos horas paracomer, porque las distancias son más largas. Locierto es que no me apasiona estar aquí. Si tuviera la oportunidad de venir a Barcelona, volvería. Pero tenemos que mejorar muchoeconómicamente. Las facilidades que tienen las empresas en el Reino Unido no se tienen en Cataluña. Los trámites para abrir una empresa se pueden hacer por Internet y hasta un límite de facturación no tienes que pagar impuestos.

—¿Tiene intención de volver pronto?

—Quizás el siguiente paso es ir a Nueva York o San Francisco, porque son las ciudades punteras de mi sector. Ahora quiero viajar, coger experiencia y contactos y ya llegará el día que vuelva.