«Acostumbran a beber el agua caliente cuando comen»
La joven hace un mes que vive en Changzhou y trabaja como profesora de español en la universidad de esta localidad
La joven tarraconense Georgina Olivé hace un mes que vive en Changzou (China). Ha encontrado trabajo como profesora de español en la universidad.
—¿Cuál fue su primera impresión enllegar?
—Cada día es una nueva aventura donde voy aprendiendo cosas nuevas. Hay cosas que te enamoran y otras a las queno me podré acostumbrar nunca. Me chocó mucho que la gente me mire por la calle. Un día me desgastarán. Se te quedan mirando fijamente y te señalan porque te ven extrañoporser extranjero. Me han llegado a decir que tengo los ojos demasiado grandes e, incluso, me han pedido autógrafos o quieren hacerse fotografías contigo.
—¿Fue muy sorprendente el cambio?
—Las cosas que me costaron más de asimilar fueron los horarios, la comida picante, que a la mayoría de restaurantes no haya inodoro y la bebida que sirven en los restaurantes. Cuando vas a comer fuera los restaurantes te regalan el agua.Para comer no tienes que pagar la bebida si es agua y, si quieres otra cosa, te la puedes traer del supermercado y entrarla al restaurante sin problema. El problema recae en que los chinos acostumbran a beber el agua caliente e, incluso, hirviendo como si fuera te. Y claro está, podéis comprender que en el mes de agosto, cuando llegué, no me apetecíamucho.
—¿Cuáles son las principales diferencias?
—Podría estar horas, porque hay muchas cosas diferentes. Los chinos acostumbran a desayunar a las seis o siete de la mañana, comen entre las once y media y las doce y media del mediodía y cenan a las seis de la tarde, y yo hagolo que puedo. Con la comida he tenido experiencias muy desastrosas y otros de buenas. Una vez cogí un plato que parecía arroz a la cubana con un huevo frito y jamón dulce. La elección fue fatal. Resultó que lo queparecía salsa de tomate era salsa picante. Además, en laChina tienen un concepto de postres y de pastelería muy diferente. Si ves una especie de caña rellenade lo que parece chocolate, seguramente te equivocas y resulta que está rellenade unas judíasmuy típicas de aquí que tienen un color oscuro. Los chinos no siguen un orden en la comida como nosotros de entrante, primero, segundo y postres, sino que piden todo lo que quieren y lo mezclan todo, así que puedes ver cómo van haciendo cucharada de fideos,mordiscode sandía y después cogen un poco de carne. No me acostumbraré a la higiene ni al tráfico de aquí, los coches siempre tienen preferencia. Nos quejamos de la SanidadenEspaña, pero doy gracias cuando veo algunos hospitales de aquí. Tampoco soporto la manía de los chinos de escupir en el suelo y eructar cuandoles apetece.
—¿Cuáles son los lugares más característicos?
—Lo más característico de Changzhou es la Pagoda (Tianning templo) que está en el centro de la ciudad, se trata de una torre de madera de unos 84 metros. Los parques también son muy característicos. Puedes encontrar el Changzhou Dinosaur Park, el parque de Yan Chen y otro que se caracteriza por tener sobre un lago una escultura muy grande con forma de nenúfar que se ilumina de noche.
—¿Cómo se está viviendo la crisis?
—La gente de clase alta vive bastante bien pero la gente con problemas económicos sufre mucho. Por ejemplo, las personas mayores, que poseían un sueldo más bien bajo cuando trabajaban, ahora no pueden cobrar pensión y trabajan haciendo de jardineros o de basureros. No se jubilan, «mueren conlasbotas puestas».
—¿Qué costumbre se llevaría?
—Su manera de ser. Son mucho más honestos y confiados que en otros lugaresde Europa y el índice de criminalidad es muy bajo.