Ángel Juárez: «Empecé a ser militante por amor»
Ángel Juárez anima a la gente a vivir su propia revolución con su último trabajo: ‘Las crisis de la crisis’
«Cuando se legaliza la injusticia, la resistencia es un deber y denunciarla una obligación». Éste es uno de los 25 poemas que se pueden encontrar en la obra Lascrisis de la crisis, de Ángel Juárez. Natural de Granada, pero tarraconense desde hace más de cuarenta años, ha editado su sexto trabajo que se caracteriza por decir las cosas claras, sin morderse la lengua y animar a la gente a vivir su propia revolución. Sin embargo, cuando se decide a hablar de él mismo reconoce que empezó a militar en movimientos obreros y sindicalistas en la ciudad por amor. «Conocí a mi actual esposa en el Totem, que todavía existe, pero para poder salir con ella entréen temas de lucha obrera porque ella era del movimiento feminista y empecé a militar por amor, para estar más cerca de ella», detalla entre carcajadas.
Aquello que no se le puede negar es que la película de su vida se ha escrito a pie de calle, ya que después de militar durante casi una década en el Moviment Comunista de Catalunya (MMC) y ser miembro de Comisiones Obreras, lideró durante veinte años la Associacióde Veïnsde RiuClar, a la vez que ha colaborado en la Federaciód'Associacions de Veïns de Tarragona.Ahora bien, también se ha situado como uno de los defensores de la ecología en clavelocal a través de Mare Terra Fundació Mediterrània. «Con el tiempo me he dado cuenta de que el ecologismo no va a ningún sitio, si sólo nos concentramos en cuidar nuestra localidad. No servirá de nada preservar un lugar, si en la ciudad del lado no se hace nada al respecto. La ecología tiene que ser global y mundial», añade.
Para entender qué quiere explicar a través de la recopilación de artículos y poemas de Las crisis de lacrisis, Juárez no esconde que «nací en un barrio obrero, familiar y muy humilde y en casa éramos once hermanos». En este sentido, asegura que «desde bien pequeño entendí y conocíla dureza de la vida, pero a la vez la parte más bonita: la supervivencia era compartir». Este jueves a las siete y media de la noche presentará su obra en sociedad en la Casa Canals. Será entonces cuando grite a los cuatro vientos que «la sociedad está anestesiada y vive en el conformismo». Más allá de los versos con anhelos de libertad, los artículos que ofrece buscan que el lector reflexione. «Todo aquel que hemos estado ante entidades o asociaciones de vecinos tenemos la obligación de denunciar todo aquello que vivimos. Con la llegada de la crisis, desde la Fundaciólo vivimos en primera persona, porque las ayudas cayeron en picado. Pero también lo he vivido en primera persona en el trabajo, cuando decenas de personas te explican su terrible situación», lamenta.
Asimismo, considera que «para alcanzar el cambio real hay que esperaruna generación, 25 años. A corto plazo no lo encontraremos. Los jóvenes que ahora están sufriendo los estragos de la crisis serán los que, cuando tengan hijos, lucharán realmente por una sociedad mejor. Ahora, todavía hay demasiada gente en la poltrona que ya no recuerda lo que vivió de joven». Por este motivo, defiende que «el revolucionario más peligroso es aquel que tiene la barrigallena. Cuando pasamos hambre todos nos volvemos revolucionarios, pero la mayoría se olvida cuando todo vuelve a ser mejor».Juárez demuestra que no quiere dejar de batallar para denunciar «las injusticias» y adelanta que ya está trabajando en tres libros más. Uno de ellos, se basará en «historias que he vivido por todo el mundo, ya sea en Nicaragua o en el Sáhara». También continuará a bordo del barco de la poesía, ya que para él se convierte en «una sesión de terapia» y, tan pronto como pueda, publicará lo que será su sexto trabajo de este género literario.