La urbanización de la zona de Viladegats podría empezar en un año
El concejal Josep M. Milà explica que «SMHAUSA necesitará al menos seis meses para tener el proyecto de reparcelación»
El Ayuntamiento de Tarragona ha dado un paso en firme en la urbanización de la zona de Viladegats. En el plenario del pasado viernes, aprobaron que se otorgara la condición de administración actuante al Servei Municipal de l’Habitatge i Actuacions Urbanes S.A. (SMHAUSA). Tal como explica el concejal de Urbanismo, Josep Maria Milà, este hecho supone que «será SMHAUSA quien adquiere la responsabilidad del planeamiento y la ejecución de las obras para mejorar este lugar». En este sentido, hay que recordar que urbanizar Viladegats es uno de los objetivos que el gobierno de Josep Fèlix Ballesteros hace añospuso sobre la mesa, pero que todavía no ha llegado a buen puerto. Milán destaca que «era una voluntad de Territori y, ahora finalmente, a nivel operativo se ocupará SMHAUSA».
ElServei Municipal de l’Habitatge de la ciudad tendrá que llevar a cabo el proyecto de reparcelación, el plande mejora urbana y el proyecto de urbanización de la zona. El concejal calcula que «para tener terminado el proyecto de reparcelación necesitaremos al menos seis meses». A la vez, calcula que se podrá iniciar las obras de urbanización «dentro de un año». El coste de elaboración del paquete de proyectos y el plande mejora podría ascender hasta los 140.000 euros, una dotación económica que el Ayuntamiento ya tiene en sus manos.
Milà destaca, sin embargo, que «el objetivo es elaborar unos arreglos con las condiciones mínimas que establece la ley. No queremos poner ningún tipo de lujo. Queremos llevar a cabo unos trabajos similares a los que se hicieronenla zona de Rodolat del Moro». Por eso, asegura que se urbanizará el espacio garantizando servicios como «el acceso rodado, red de agua, alumbrado público, suministro eléctrico y alcantarillado». También recordó que «los vecinos tendrán que pagar las obras de urbanización»de este espacio que, actualmente, ya es suelo urbano, pero en el cual no se pueden otorgar nuevas licencias de obras, ya que no cumple con la condición de «solar» porque le faltan los servicios básicos que se quieren instalar.
Asimismo, el concejal recordó que «hay muchas parcelas por edificar en Viladegats, pero si no se urbaniza, nunca se podrá hacer». El objetivo final, defendía, es «ir desencallando algunas de las zonas que se encuentran en esta situación que no nombraría ilegal, sino permitida, ya que se construyeron hace más de 40 años y sin normas urbanísticas».
Hay que recordar también que el consistorio aprobó inicialmente la modificación puntual del POUM en el ámbito denominado del Culubret (PPU-62) –superficie de 23.300 metros cuadrados que por el oeste limita con la carretera de Santes Creus e, interiormente transcurre el camino de Viladegats y del Llorito- y una pequeña parte del Valle del Llorito (PPU-41), en junio del año pasado. Ésta ya tenía que servir para acelerar el desarrollo de sus planesparciales que, en primera instancia, se preveía desarrollar entre el 2025 y el 2030, pero que entonces ya se adelantó y previeron llevar a cabo antes de que se acabe el año 2018. El objetivo principal era cambiar el actual uso industrial de los terrenos a nuevos usos residenciales, hecho que también permitirá la creación de una gran avenida de acceso a Tarragona que mejore la imagen de la ciudad en esta entrada y canalizar el tránsito rodadoproveniente de la zona de Sant Pere i Sant Pau y la Oliva.