La proliferación de almacenes chinos en Les Gavarres provoca un exceso de oferta

El aumento del número de grandes superficies con inversores chinos que se han instalado los últimos tiempos en la zona de Les Gavarres provoca un exceso de oferta que podría tener consecuencias en los resultados de algunos de estos establecimientos. Con la apertura-remodelación del centro Hiper Asia, ubicado en la rotonda de entrada en la zona comercial, ya son cuatro las tiendas de grandes dimensiones de productos asiáticos. Así que alguno de estos empresarios considera que esta proliferación de establecimientos similares hace que se esté saturando el mercado y que los resultados empiecen a revelar que «ya son demasiados».

En el original Merca China, que se instaló casi hace una década al lado de la hamburguesería McDonnald's, le siguió el Shopping Center (en el otro lado del A7) y más recientemente abrió el Mercasa (en las antiguas instalaciones del Lidl). Hace dos meses se incorporó a la oferta de «chinos» el Hiper Asia, que aunque abrió sus puertas el 5 de agosto, previamente había sido un establecimiento de muebles también con propietario chino, y previamente un almacén de venta de lámparas. Éste último es el que dispone de una superficie mayor, ya que en el interior del gran almacén se ofrecen 3.000 metros cuadrados llenos de artículos de todo tipo, aunque destacan los muebles. Su gerente, Susana Peiang afirma que los resultados obtenidos de momento no son los esperados y afirma que «hay un exceso de lugaresparalos mismos clientes» y que esta diseminación de almacenes asiáticos afecta directamente a los resultados. Ramon Rull, administrador de Les Gavarres, también confirma este punto, ya que asegura que ciertos empresarios chinos han mostrado su contrariedad hacia al hecho de que se instalen nuevos establecimientos similaresenla zona, que, por otra parte, ya no dispone de espacio libre.

La incorporación de nuevos establecimiento chinos, comportaría un peligro para sus cuentas de resultados e, incluso, podría provocar el cierre. Sobre la aperturade nuevas superficies del sector con artículos de origen asiático, Peiang afirma que ellos no lo pueden impedir, pero que dependerá mucho de la concesión de licencias que se den por parte del Ayuntamiento, pero que «si queda un local vacío, podría ser que alguien se instalara», eso depende del capital del cual se dispone, pero, en principio, si se hace un sondeo de mercado, se puede descubrir claramente que tantos almacenes chinos concentrados en un espacio tan reducido diversifican de tal manera la clientela que los resultados serían dudosos.

Consecuencias en el Tecnoparc

Se da la circunstancia de que a cinco kilómetros de Les Gavarres existe un centro de similares características, Merca Eurasia. Aunque su director afirma que tienen diferentes proveedores, incluso de países de Europa como Alemania. Aunque su clientela acostumbra a provenir de Reus, y, por lo tanto, no tendría que tener consecuencias en la proliferación de Les Gavarres, sí que reconoce una bajada de los resultados en los últimos tiempos en comparación con ejercicios anteriores, aunque –según afirma– dispone de una clientela fiel y fija.

Ubicarse en Les Gavarres o en el centro de la ciudad de Tarragona puede depender de factores, pero lo principal es encontrar un local libre, según explica la empresaria china, que afirma que no siempre es posible abrir un negocio en la ciudad.Uno de los síntomas de los resultados de Les Gavarres podría detectarse en la aperturareciente a la calle Ritort i Faus, esquina con lade RoviraiVirgili–también de dimensiones considerables– y que pertenece al mismo propietario que Shopping Center, ubicado en Les Gavarres.

Se calcula que la superficie total ocupada por los cuatro grandes almacenes chinos en la zona comercial tarraconense sería próxima a los 10.000 metros cuadrados, lo que ocuparía un centro como Carrefour o Leroy Merlin. En apariencia y según testigos, el centro asiático que más clientela absorbería sería Merca China, ya que porsu veterania y por ser el primero en instalarse en la zona recibe más visitas, algo que se puede apreciar a simple vista mirando las colas de sus cajas.

Siguiendo con este trabajo de observación, donde menos clientes se detectan es en Mercasa (antiguo Lidl) y en Shopping Center, aunqueéste, al ser el segundo que abrió dispone de una clientela fija, como pasa en Merca China. Aunque son empresasa menudo con vínculos familiares y a veces de amistad, cada uno de los establecimientos fija sus precios y no se pactan entre ellos acuerdos.Así que hay clientes que porun mismo artículo pueden recorrerlos diferentes centros en busca del mejor precio. Por otra parte, la salida de la crisis no ha representado un freno de la compra en el «chino» y afirman que sus precios atraerán siempre a las personas con un poder adquisitivo más bajo y haya o no crisis siempre se buscará la mejor calidad/precio.