Laboral
El personal de la Autoescuela Europa pide que se investigue si es solvente
La empresa reconoce que los despidos fueron improcedentes, pero incumple el primer plazo del pago de las indemnizaciones
Los profesores de la Autoescuela Europa, que fueron despedidos de manera improcedente a causa del cierre repentino del centro, piden al juez que investigue si los propietarios de la empresa son insolventes. Esta petición llega después de que la autoescuela reconociera que los despidos de los empleados fueron improcedentes y que se llegara a un acuerdo, por ambas partes, para pagar las indemnizaciones.
Pero el plazo del primer pago ya ha vencido y la Autoescuela Europa todavía no ha hecho frente a la cuantía. Es por eso que los trabajadores han pedido al juez que se investiguen los bienes y las propiedades de los empresarios, «que nos consta que tienen muchas», explica Adela, una de las profesoras.
El pasado mes de abril, la Autoescuela Europa cerró sus puertas de manera repentina, alegando la jubilación del propietario. Los cuatro trabajadores, –que enseñaban a conducir a los alumnos–, decidieron denunciar a los propietarios por despido improcedente. En el primer intento por llegar al acuerdo, los abogados de la autoescuela alegaron la jubilación como a causa del cierre. Después de que se demostrara que no era cierto, los trabajadores interpusieron una demanda judicial contra los propietarios que acabó con un acuerdo por poder cobrar las indemnizaciones.
El plazo del primer pago ya ha vencido y los trabajadores no han visto ni un euro. Es por eso que el abogado se muestra convencido de que finalmente la justicia declarará insolvente a la empresa, «ya que es muy complicado demostrar sus propiedades», explica Lluís Vázquez, abogados de los trabajadores. En caso de que eso sea así, los cuatro empleados tendrán que recurrir al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA), –un organismo estatal que hace frente a indemnizaciones en caso de que la empresa se declare insolvente. «Desde un inicio, sabíamos que acabaríamos así», explica Vázquez.
El problema es que FOGASA establece un límite en la cuantía de las indemnizaciones (18.000 euros aproximadamente), que en esta ocasión supondría que algunos de los trabajadores cobraran menos del qué corresponde en un despido normal. Este es el caso de Adela, una de las profesoras que hacía 15 años que trabajaba en la Autoescuela Europa.
¿Otras propiedades?
Adela explica a Diario Més que habría sufrido mobbing por parte de los propietarios de la autoescuela durante dos años, «porque la intención era que yo terminara de la empresa y así no tener que pagarme ninguna indemnización», explica la profesora, que durante el año 2013 denunció, en dos ocasiones, en la empresa por incumplimiento del contrato.
Adela y los otros tres profesores han mostrado en varias ocasiones a su apoyo a los más de 200 alumnos afectados por el cierre de la autoescuela. De hecho, Adela asegura que mientras que el propietario los informaba de la situación, –al día antes del cierre–, todavía se cobraban matrículas. Hay que recordar que tanto alumnos como profesores siempre han mantenido que los denunciados tenían la intención de abrir otra autoescuela en escasos metros de la Europa, donde actualmente se ha instalado la Autoescuela Nueva. El propietario de la Nueva asegura no tener ningún vínculo con la Europa