La Plataforma Salvem el Parc pide papeleras y sistemas de acequia

Los miembros de la Plataforma Salvem el Parc de la Muntanyeta –ubicado en Sant Pere i Sant Pau-, están hartos de las promesas del Ayuntamiento. Desde hace años, los usuarios del parque piden que se instalen más papeleras en la zona, ya que «en la explanada del Parc, formada por dos hectáreas, sólo hay una papelera», asegura Jan Aran, miembro de la plataforma. Además, la entidad también pide que se incorpore un sistema de acequia para evitar que las plantas y las hierbas queden secas, y también piden un sistema para cortar la hierba. «Nosotros ya conocemos las promesas del alcalde: siempre es sí, pero nunca pone fecha», explica Arán.

Por otra parte, la plataforma reconoce que han sido muchas las reuniones que se han celebrado con el Ayuntamiento, en las cuales se contemplaban temas como la instalación de señales que marquen los accesos del Parc o carteles que prohíban la entrada de vehículos en la zona. Pero estas promesas, según los usuarios del Parc, nunca ven la luz.

Los miembros de la plataforma aseguran que el Parc es una zona muy utilizada por los vecinos del barrio. «La gente va a practicar deporte desde primera hora de la mañana, pasean el perro y hay familias que van a pasar los domingos», explica Arán, quién lamenta «el poco valor que se ha dado siempre en este lugar de la ciudad, teniendo en cuenta que la zona es una muestra de la fauna y la flora de nuestro país».

Camiones en el Parc

Las últimas dos semanas, el Parc ha tenido como protagonistas camiones de gran tonelaje. Algunos vecinos han observado con incredulidad el paso de camiones y excavadoras contratadas de manera privada. Según la Plataforma Salvem el Parc, el Ayuntamiento dio licencia de obras a un vecino de las casas del Pedrol para construir una piscina. «Ahora bien, nos extraña que también dieran el permiso para que los camiones accedieran al lugar a través del Parc», explica Arán, que añade que «en la entrada del Parc había un cartel casero donde ponía salida de camiones». Los vecinos consideran que el paso de estos vehículos habría estropeado algunos elementos de la zona. Desde el pasado viernes, ya no hay camiones, pero todavía se puede ver el rastro de las ruedas. Los vecinos piden una explicación, «ya que este paso no se puede utilizar para uso privado», dice Arán.