Miles de voces unidas en un solo grito contra las violencias machistas

Más de 2000 personas han recorrido las calles de Tarragona en contra de las violencias machistas. La marea lila, organizada por varias asociaciones reunidas bajo el colectivo local 5N, ha reunido movimientos feministas de toda Cataluña y de la Comunidad Valenciana. En la cabecera lucía el lema de este encuentro: un grito contra las violencias machistas.

Precisamente lo que ha querido hacer visible esta manifestación es la multitud de violencias que se viven en la sociedad. Montserrat Cervera, miembro de la asociación Noviembre Feminista, ha puesto de manifiesto que «este grito va para todas las violencias, para las que desgraciadamente causan muertes pero también para las físicas y psicológicas que se producen en la intimidad de la sociedad.»

De las múltiples agresiones que se producen, Cervera ha querido poner de manifiesto una muy concreta: «Ponemos nuestras fuerzas para denunciar la violencia estructural, hay mucha gente que denuncia violencias pero después no hay recursos que generen una conciencia más generalizada». En este aspecto, ha querido evidenciar que muchas de las órdenes de alejamiento que se piden se acaban anulando. Aun así, Cervera ha reconocido que «se ha adelantado bastante» pero que se siguen produciendo estas violencias «fruto de una sociedad patriarcal de la que no nos hemos conseguido liberar».

Extenderse más allá del 25N

Esta manifestación cobra un sentido especial ya que se produce casi un año después de la que hubo, a nivel estatal, el 7 de noviembre. Además, tal como ha reconocido Cervera, sirve para «hacer un poco de previa de cara al 25N, que es el día contra las violencias machistas.» Aun así, los colectivos feministas catalanes no esconden su deseo de hacerse notar en otras fechas «más separadas del 25N para que no quede en una sola cosa y se haga eco con más actos durante todo el año».

El objetivo utópico, tal como ha reconocido Montserrat Cervera, sería llegar a un día en lo que «no se tengan que hacer manifestaciones como estas porque querrá decir que hemos acabado con esta y tantas otras injusticias». Mientras tanto, tal como ha quedado demostrado en Tarragona, seguirá habiendo colectivos que alcen la voz.