Los Juegos Mediterráneos siguen en modo divagación
Ballesteros dice que el Estado se compromete, en qué se hagan y, sobre la aportación que llegará desde Madrid, sin concretarla, «la ida es que quede incorporada en los presupuestos de 2017»
Nueva reunión, pero poco a concretar. Josep Fèlix Ballesteros se ha reunido esta mañana con el ministro de Educación, Cultura y Deportes, Íñigo Méndez de Vigo, para tratar el aplazamiento de los Juegos Mediterráneos al 2018 y para conocer las intenciones desde el Estado hacia este acontecimiento deportivo.
De momento, «el ministro se ha comprometido a trabajar para que los Juegos Mediterráneos 2018 sean una realidad. No escatimará en esfuerzos y, para nosotros, eso es importante», según ha manifestado el presidente de Tarragona 2018 y alcalde de Tarragona a la salida del encuentro.
No hay muchas diferencias entre lo que hoy se ha explicado y se ha llevado diciendo durante los últimos meses sobre la aportación del Estado. Desde el Gobierno central siempre han estado al «lado de los Juegos», tal como han ido asegurando un día y otro, pero sigue sin haber ni cifra ni fecha para cobrar la aportación del Estado. Sobre este asunto, Ballesteros ha detallado que «se crea un equipo de trabajo de diálogo permanente para concretar las necesidades» y, los millones (no se sabe cuántos) que tienen que llegar, «la idea es trabajar para que queden incorporados en los presupuestos del 2017».
Los beneficios fiscales
Era un hecho que era de esperar, pero lo ha confirmado Josep Fèlix Ballesteros. Los beneficios fiscales se alargarán un año más, de manera que los socios/empresas podrán disfrutar. «Se abre un periode de diálogo permanente para determinar cuál es la concreción de la aportación y del trabajo conjunto de cara a los Juegos del 2018 y, aparte, se han comprometido a alargar los beneficios fiscales hasta el 2018 para las empresas colaboradoras actuales y para las que puedan venir».
El Gobierno, a la Fundación
Finalmente, Ballesteros se ha felicitado porque «por primera vez, el gobierno de España ocupará la silla vacía que tiene a la Fundación del Comité Organizador del 2017 para implicarse al máximo y formar parte de este proyecto como forman parte el Ayuntamiento de Tarragona, la Diputación de Tarragona, la Diputación de Barcelona y el Gobierno de Cataluña».