Disputa política al pleno por el aplazamiento de los Juegos Mediterráneos

El aplazamiento de los Juegos Mediterráneos del 2017 en el 2018 ha eclipsado parte de la sesión plenaria ordinaria de este viernes por la mañana en el Ayuntamiento de Tarragona. En las aproximadamente dos horas de debate monotemático, la disputa política ha girado entorno las diversas mociones presentadas en relación a los juegos. La primera de estas, de la CUP, que proponía la renuncia definitiva a la cita deportiva, ha quedado tumbada por 19 votos en contra de equipo de gobierno -PSC, PP y UDC-, CiU y C's, 3 a favor -CUP e ICV- y 4 abstenciones -ERC. Tampoco se ha aprobado la consulta popular para coger el pulso a la sociedad sobre este asunto, planteada por ERC. De hecho, eran ideas que ya se habían presentado -y rechazado- en anteriores plenos. Por otra parte, se ha dado luz verde a la creación de una comisión de seguimiento para garantizar la máxima información, en una moción presentada por C's. El gran interrogante que sigue sin resolverse es el sobrecoste para tener que posponer los juegos.

«Con los 12 famosos millones de euros hacemos corto, hay que contar un año más de gasto organizativo, eran 5 millones según el presupuesto de la Fundación Tarragona 2017, faltará añadir los costes de indemnización, etc.; hay que facilitar el coste económico real auditado que supone aplazar los Juegos, y también el de abandonar», ha expuesto al portavoz del grupo municipal de ERC, Pau Ricomà. Los republicanos han arañado más apoyo para hacer una consulta ciudadana sobre los Juegos -voto favorable del grupo de CiU y abstención de C's-, si bien la propuesta también ha acabado tumbada.

Ricomà ha acusado al alcalde de pretender ser el «Pasqual Maragall tarraconense» y dejar un «agujero» en la ciudad por culpa de su «optimismo temerario». ¿«Cuándo a Usted desde Madrid le decían una vez y otra que no había dinero, y nos decía a nosotros que todo iba como estaba previsto y que tendríamos las inversiones a tiempo, qué parte de la frase de que no había dinero para los Juegos no entendió»?, le ha preguntado. «Usted nos ha engañado muchas veces y ahora tiene un problema de credibilidad, le pasa como en aquel del cuento del lobo, y las medias mentiras ahogan la verdad», ha lanzado.

La CUP también ha cargado contra Ballesteros por la falta de credibilidad y para hacer volar palomas de un proyecto que nunca ha tenido la dotación presupuestaria necesaria. La concejala cupaire Laia Estrada ha desgranado una extensa cronología, desde el 2012, para poner evidencia la «incapacidad» del gobierno de sacarlo adelante, no retirarse cuando tocaba y pegarse al gobierno provisional del Estado como única carta de justificación. «No podemos confiar en Ustedes, su proyecto estrella ha hecho aguas por incapacidad del gobierno, al igual que pasó con el parking Jaime I,» ha afirmado Estrada.

Más moderados, los convergentes han preferido no lanzar la toalla de los Juegos a la espera de sí finalmente se obtiene la financiación, mientras el grupo de Ciutadans ha reiterado que «desistir es peor que continuar». «La falta de información ha sido el gran problema, no somos niños pequeños, hace falta más sinceridad, vale más uno «no» justificado que decir 'sí', sabiendo que no lo podrás cumplir», ha afirmado el portavoz de C's, Ruben Viñuales, coincidiendo con la opinión de ICV. La moción de C's ha sido aprobada por todos los grupos, excepto ERC y la CUP. «Es la moción más factible y la más constructiva», ha opinado el portavoz convergente Albert Abelló.

Por su parte, el concejal socialista Javier Villamayor, que también es coordinador generales de los Juegos, ha reconocido que no han estado unos días fáciles, si bien desde el aplazamiento han recibido el apoyo|soporte de cuatro ayuntamientos «importantes», interesados también al ser subsedes. «Mientras va este pleno, ahora mismo hay 175 personas trabajando en la Anilla Meditèrrania», ha afirmado Villamayor, como demostración de que el acontecimiento sigue vivo. «Es la mejor opción para la ciudad, estoy absolutamente convencido y no he dejado ni un milímetro de creer», ha sentenciado el alcalde Josep Fèlix Ballesteros.

Piden dimisiones por los Juegos e Inipro

En el turno de ruegos y preguntas, la CUP ha aprovechado para pedir la dimisión de Javier Villamayor, por el aplazamiento de los Juegos, y también de la concejala Begoña Floria, cerca su reciente imputación en el caso Inipro, así como también del alcalde Josep Fèlix Ballesteros.

El grupo de ERC también ha exigido que Florecía dimita, por la «gravedad» del caso Inipro. Ballesteros les ha pedido que dejen de «judicializar» la política.

La concejala cupaire Laia Estrada ha preguntado al alcalde si era conocedor del equipo de 'ciberactivistas' que trabajaban para su campaña. «La esfera privada es la esfera privada», ha respondido Ballesteros, de que se ha limitado a añadir que «una campaña es muy extensa».

El pleno de Tarragona de este viernes ha empezado pocos minutos después de las nueve de la mañana y ha acabado hacia las tres y media de la tarde.