El suelo del Jardín Vertical de Tarragona acumula excrementos de paloma, agua y hojas

Un alarmante aspecto de dejadez es el que se encuentra la gente que pasea por el entorno del Jardín Vertical de Tarragona, localizado en la avenida Vidal i Barraquer y que discurre en paralelo en los almacenes de la antigua Tabacalera, donde hoy están las sedes de dependencias municipales como la Capsa Jove, el Tarragona Impulsa y el Arxiu Municipal.

Desde el Jardín Vertical, se precipitan a tierra reguers de agua que, una vez mezclada con hojas secas no retiradas, ofrece un aspecto lamentable. En esta pasta grisácea se añaden excrementos de las palomas que han aprovechado la estructura metálica del citado jardín para establecer su hábitat. Esta imagen negativa que ofrece esta zona de la ciudad hace semanas que se mantiene e, incluso, empeora por falta de limpieza.

El Jardín Vertical fue una iniciativa nacida de la política smart y es, según el Ayuntamiento, la fachada verde mayor de Europa con sus 185 metros de anchura por los 18 de altura. El conocido como Smart Parc Tabacalera permite, precisamente, la eliminación de residuos y la reducción de la polución, una de las problemáticas más latentes en las ciudades actuales a causa del aumento de dióxido de carbono a la atmósfera, segundo informa al Ayuntamiento. Esta visión contrasta con la realidad de un espacio sucio y poco sano.