La Presó de Pilats en el Pretori y el grafito de la Antiga Audiència, señalizados como espacios de memoria
Son dos lugares emblemáticos en la resistencia y oposición antifranquista
El Ayuntamiento ha instalado nuevas señalizaciones en la Presó de Pilats en el Pretori y en el grafito de la Antiga Audiència que los identifican como espacios emblemáticos de la memoria en Tarragona. Esta acción se enmarca en el proyecto Espacios de Memoria, que pretende señalizar y mantener los lugares representativos de hechos relacionados con la resistencia y oposición antifranquista.
La torre romana del Pretorio fue la llamada Presó de Pilats, un espacio destinado a prisión provincial hasta 1953. Un total de 6.900 personas pasaron por esta prisión entre 1939 y 1948. La señalización de este punto permitirá recordar el padecimiento y esfuerzo de las personas demócratas en la lucha contra la dictadura. Por otra parte, el grafito en el interior de la Antiga Audiència es el único resto material que testimonia el inicio de la Guerra Civil en Tarragona.
El consistorio tarraconense ya ha realizado en otras ocasiones actividades de recuperación de la Memoria Histórica en colaboración con el Memorial Democrático y la Asociación de Víctimas de la represión Franquista en Tarragona. El año 2009 se dignificó la fosa común del Cementerio de Tarragona, que el año siguiente se mejoraba con la escultura denominada Dignidad, obra de Salvador Mañosa, dada por la Asociación de Víctimas del Franquismo de Tarragona. Por otra parte, en el 2011 se inauguró un monumento en el Camí de la Oliva en recuerdo de los fusilados en aquel lugar. Pocos años después, la Asociación de Víctimas del Franquismo de Tarragona añadió una placa de recordatorio. Esta misma entidad inauguró en el 2014 una placa de homenaje a las mujeres que estuvieron encarceladas en el convento de religiosas Oblatas.
La concejala de Patrimoni de l'Ajuntament, Begoña Floria, ha destacado que «estos proyectos son importantes porque permiten trabajar heridas y conocimientos de la historia de nuestra ciudad», aunque admite que «son complejos de llevar a cabo porque hay diferentes sensibilidades».