Rubén Marín celebra diez años llevando|trayendo juguetes a los niños de Juan XXIII

Los niños ingresados en la planta de Pediatria de l'Hospital Joan XXIII recibieron ayer la visita del rey Gaspar, acompañado de un paje, del torero tarraconense Rubén Marín, y del también matador Serafín Marín, los cuales repartieron cerca de trescientos regalos, y mucha ilusión entre los más pequeños. Este es el décimo año que el torero de Tarragona lleva a cabo esta iniciativa solidaria.

En anteriores ocasiones, Marín hizo la visita junto con el jugador del Barça Jordi Alba, el cantante Antonio Orozco o Vergüenza Ajena, y en la edición de este año del torero barcelonés Serafín Marín, quien lo ha hecho por tercera vez. «Es un día emotivo y siempre que Rubén me lo pide lo acompaño por qué es importante poder hacer feliz, al menos por un minuto, a un niño ingresado en el hospital, y más en estas fechas».

Rubén Marín manifestó que «desde que inicié esta actividad solidaria, cada vez son más las empresas que colaboran aportando juguetes». «Por mi profesión, sé qué significa pasar fiestas como la Navidad en un hospital y decidí empezar a llevar regalos a los niños», comentó, para añadir que «va a más y ya se está convirtiendo en una tradición». Marín se mostró muy feliz cuando hacía entrega de los juguetes a los niños.

El torero tarraconense recomienda a todo el mundo «hacer esta actividad al menos una vez a la vida por qué es muy bonita y te recompensa mucho en el ámbito personal: no hay nada más bonito que ver la sonrisa de un niño cuando está hospitalizado».

Justo en el momento en que se inició el reparto de los juguetes y los regalos fue ingresado un niño. Era el decimosexto ayer tarde había en la cuarta planta del hospital. Desde hace seis años, Rubén Marín tiene una empresa y organiza exhibiciones de toreo sin sangre ni muerte del animal. Actualmente, hace estos espectáculos en Castellón para operadores turísticos de Rusia.