En la Budellera circularán 99.968 coches diarios cuando esté toda urbanizada

Cuando el Plan de la Budellera esté ejecutado al cien por cien, casi 100.000 vehículos entrarán y saldrán de la urbanización durante el día. Así lo prevé el estudio de movilidad que ha incorporado el Plan Parcial 24, conocido como el de la Budellera. El desarrollo total de este proyecto implicará un incremento del tráfico actual en la zona de Llevant con origen o destino en Tarragona, concretamente en 99.968 viajes al día en los dos sentidos, teniendo en cuenta que se edifiquen 5.700 nuevas viviendas, tal como marca el actual plan y a la espera de que se modifique. Es por eso que el plan prevé la implementación de un conjunto de medidas con el objetivo de garantizar la movilidad de los vecinos, ya sea evitando colapsos de vehículos o bien facilitando el transporte público. Por su parte, los vecinos afectados por el Plan de la Budellera, entre las alegaciones, aseguran que «el estudio de movilidad no hay por dónde cogerlo», dice Gemma Fusté, presidenta de la Federació de Veïns de l'Àrea de Llevant.

De estos 99.968 vehículos que entrarán y saldrán del nuevo barrio, un 99 por ciento estarán vinculados al sector de la Budellera y un 1 por ciento al sector de la Platja Llarga. La parte de la Budellera se localiza entre la autovía A-7, la N-340, la carretera del Llorito y la urbanización de Boscos, y la de la Platja Llarga se sitúa desde la carretera de Barcelona hasta la línea de playa, quedando dividido por la línea ferroviaria. Las infraestructuras de los dos sectores se tendrán que adaptar con el fin de acoger los vehículos de la zona.

Según este primer estudio, un 78 por ciento de la nueva movilidad se realizará a nivel intramunicipal –del barrio a Tarragona y viceversa– y un 22 por ciento será de movilidad interurbana. Con respecto a modos de transporte, el vehículo privado es el modo mayoritario (55 por ciento), seguido de ir a pie (22 por ciento) y del autobús (17 por ciento). El estudio calcula que 55.125 vehículos privados –coches o motos– pasarán al día por la zona. Es por eso que el PP24 prevé doce conexiones del sector de la Budellera con el vial existente, con el fin de evitar colapsos y mejorar el tráfico. Una de estas conexiones contempla la instalación de una nueva glorieta, prevista en el actual enlace de la A-7 con la carretera del Llorito. Según Gemma Fusté, presidenta de la Federació de Veïns de l'Àrea de Llevant, «el plan está tan mal hecho que contempla glorietas en lugares donde Fomento no permitirá instalarlas, ya que no se cumplen los requisitos de distancia entre una glorieta y otra. Pero siguen insistiendo».

Transporte público

La nueva demanda de transporte público, en el momento en que el barrio de la Budellera sea una realidad, aumentará considerablemente, situándose en 18.369 viajes más al día desde la zona de Llevant hasta el centro de Tarragona y viceversa. De estos, 14.326 se harán en autobús urbano, 2.722 en autobús interurbano y 1.321 en ferrocarril. La nueva demanda en autobús urbano se distribuirá con las diferentes líneas con parada próxima a los sectores de estudio –la Línea 1, la 8 y la 9. El estudio, sin embargo, no descarta que, cuando el plan esté ejecutado al cien por cien, se creará una nueva línea de autobús urbano que conectará Llevant con el centro de Tarragona y la estación de tren. Además, esta línea también parará en la plaza Imperial Tarraco para potenciar los desplazamientos interurbanos. Esta nueva línea ofrecerá nueve expediciones al día, costará unos 850.000 euros anuales y atravesará la avenida central del nuevo barrio de la Budellera. Ahora bien, hace falta tener claro que, durante los primeros años, la demanda será absorbida por las líneas ya existentes.

Peatones y bicicletas

Actualmente, los accesos a la Budellera no disponen de un espacio destinado a los peatones, excepto a través de la urbanización de Cala Romana. Es por eso que el plan ya prevé actuar en el tramo que va desde la N-340 hasta la rotonda de la carretera del Llorito hasta el centro de la ciudad. Con respecto al interior del barrio, se prevén aceras superiores a tres metros y calles de zona 30 o de prioridad invertida. En el sector de la Platja Llarga, la vía principal de acceso es la N-340, que no dispone de aceras adecuadas para los desplazamientos a pie. El plan prevé un trazado con un paseo de 12 metros, en el cual habrá instalados algunos pasos de peatones.

Por otra parte, el proyecto contempla la carretera del Llorito como itinerario para ir en bici hasta la Budellera, que también conectaría la N-340 con la playa y hasta la Vall de l'Arrabassada. Según el POUM, sería necesario que la calle de la Clota también fuera un acceso ciclable que conectara la N-340 con la Budellera. Todos estos accesos conectarían con un carril bici segregado en la acera de la avenida central del barrio.

La opinión de los afectados

Según Gemma Fusté, presidenta de la Federació de Veïns de Llevant, «la movilidad es uno de los puntos del plan que más nos preocupa. Cuando los vecinos de la Budellera se quieran trasladar al centro, se encontrarán una Vía Augusta y una Rambla Vella totalmente saturadas. Ejemplo de eso es que, cuando juega el Nàstic, se juntan 5.000 personas y ya se crea el caos. Imaginad qué pasará cuando la Budellera sea una realidad». Este estudio forma parte del Plan Parcial de la Budellera que, hace unas semanas, la Comisión de Urbanismo de la Generalitat cuestionó. Es por eso que el alcalde de la ciudad, Josep Fèlix Ballesteros, ha asegurado que el proyecto modificado volverá a someterse a votación para aprobarlo inicialmente.