Los vecinos del Pinatell reivindican la regularización urbanística

Los vecinos de la urbanización del Pinatell, situado a cinco kilómetros de la carretera del Catllar y que pertenece al término municipal de Tarragona, piden al Ayuntamiento que asfalte la calle principal que atraviesa la urbanización y que instale algún punto de luz en la zona. Pero para que el consistorio pueda ejecutar el deseo de los vecinos, es necesario que se resuelva el requerimiento que la entidad vecinal interpuso al Tribunal Superior de Justicia, en el cual pedía que la urbanización esté incluida otra vez en el último Plan General.

A la espera de una respuesta, los vecinos piden «que nos ayuden a arreglar la única calle que nos permite entrar en nuestras viviendas y la posibilidad de disponer de alumbrado para garantizar nuestra seguridad», explica Guillermo Alvarez, vicepresidente de la Asociación de Vecinos del Pinatell. Y es que, actualmente, las familias que viven en la zona dependen de la iluminación particular de cada hogar.

Con respecto a la vía principal del Pinatell, se trata de una avenida de aproximadamente 500 metros, que une la parte más boscosa de la urbanización con la carretera. Por esta calle pasan ciclistas y peatones que hacen rutas y excursiones hasta Boscos. «Es una vía bastante transitada, por eso pedimos ayuda para ponerla en condiciones», asegura Alvarez.

Actualmente, hay sólo seis familias que viven todo el año a la urbanización. «Pero eso no quiere decir que no tengamos derechos», asegura Eva Guasch, presidenta de la entidad vecinal. La urbanización está construida sobre terrenos rústicos, sin embargo, según los vecinos, «pagamos contribución urbana y la basura y, por lo tanto, tendríamos que tener los mismos derechos que el resto de tarraconenses,» explica la presidenta, que añade que «somos poca gente y cuesta hacer presión».

A la espera del requerimiento

En el último Plan General, el consistorio incluyó un Plan de Mejora Urbana 27, que hacía referencia al Pinatell. Más tarde, antes de la aprobación definitiva del POUM, la Generalitat de Catalunya ordenó excluir el Plan de Mejora 27 del documento, porque la urbanización no era sostenible. «Somos pocos y no les salía a cuenta urbanizar la zona», explica la presidenta. La entidad vecinal decidió contratar a un abogado y presentar un requerimiento al Tribunal Superior de Justicia con el fin de revocar la decisión de la Generalitat. «En esta misma situación se encontraban las urbanizaciones de la Oliva y del Rodolat del Moro. Ellos ya lo tienen solucionado y han reconocido sus terrenos como urbanos. Ahora falta que nos lo reconozcan a nosotros», explica la presidenta, que añade que «este vacío legal hace que nadie nos haga caso y tengamos que vivir en estas circunstancias».

Los vecinos del Pinatell luchan por conseguir la regularización urbanística desde hace más de cuarenta años. El resultado de tantos años de reivindicación ha sido la incorporación de una parada de autobús a la urbanización y del sistema de recogida de residuos. En los últimos meses, la entidad vecinal se ha reunido con diferentes representantes políticos del consistorio. «Siempre se comprometen pero nunca actúan», explica Alvarez. De momento, el Ayuntamiento está a la espera de resolver el conflicto urbanístico con el fin de llevar a cabo las acciones pertinentes.