La Sala Trono bajará definitivamente el telón el 25 de marzo
Sus gestores buscan un nuevo local donde continuar las representaciones en la ciudad
La Sala Trono de Tarragona cerrará puertas el 25 de marzo después de catorce años de programación ininterrumpida de teatro contemporáneo de septiembre a junio. Este espacio de la Part Alta, con una cincuentena de butacas, necesita unas obras de mejora y adaptación que el equipo no ve viable afrontar. Aunque han recibido ofertas de tres localidades del entorno de Tarragona para gestionar sus teatros, la Sala Trono sigue buscando un nuevo local en la ciudad donde continuar las representaciones teatrales y poder crecer. «Es muy complicado encontrar un espacio adecuado, pero no nos queremos precipitar», ha afirmado el gestor de la Trono, Joan Negrié. El cierre coincidirá con la función número 50 de la producción ‘Això és tot’, interpretada por Oriol Grau y Pau Ferran. Hasta día de hoy, este espectáculo ha acogido a 1.569 espectadores en 39 funciones.
Con el fin de simbolizar oficialmente el cierre, el 2 de abril se celebrará un «funeral» que está abierto a la ciudadanía. La comitiva, que tendrá que ir vestida de negro, saldrá de la plaza de la Font, recorrerá la calle Major y finalizará en el local de la calle Misser Sitges, que se mantendrá como lugar de ensayo y de producción.
Negrié ha insistido en que la actividad de la marca Sala Trono no se detiene y ha adelantado que, el 13 de mayo, iniciarán los ensayos del espectáculo ‘Els tres aniversaris’. El montaje es una coproducción de la Sala Trono, el Teatre Metropol de Tarragona, el Teatre Bartrina de Reus, el Teatre Principal de Valls, la Sala Villarroel de Barcelona y el Teatre de Salt. El estreno tendrá lugar el 28 de abril en Tarragona, el día 29 en Valls y el 30 de abril en Reus.
Mejoras «inviables»
Con el fin de adaptarse a la normativa vigente, la Sala Trono tendría que llevar a término mejoras en la iluminación y la insonorización, habilitar una rampa y un baño para minusválidos, así como una salida de emergencia. Vistas las pequeñas dimensiones del local -de titularidad municipal y gestión privada-, sus gestores no lo consideran viable y apuestan por aprovechar el momento, en el que ya habían tocado techo, para «crecer» y «coger impulso» en un espacio más amplio, según Negrié.
En este sentido, todavía no han encontrado ningún local que se ciña a sus necesidades, aunque el Ayuntamiento también participa activamente en la busca. Joan Negrié ha negado que tengan ninguna propuesta «firme» para instalarse al Metropol y ha explicado que han descartado el teatro del Poso de Pescadores –rehabilitado recientemente por la Autoridad Portuaria- porque las medidas del escenario son más reducidas que las del actual.
El gestor de la Sala Trueno se ha mostrado partidario de no ir con prisas e intentar encontrar el local más idóneo, aunque ha admitido que, si lo encontraran ahora, difícilmente podría estar terminado a tiempo para la próxima temporada de otoño. A pesar de todo, el equipo de la Trono trabaja en la producción y organización del Festival Internacional de Teatro de Tarragona (FITT).
Gran éxito del espectáculo ‘Això és tot’
Hasta el 25 de marzo, la Sala Trono seguirá programando el espectáculo ‘Això és tot’ con el objetivo de alcanzar a los 2.000 espectadores durante las 50 funciones que se habrán ofrecido. La obra explica la historia de dos hermanas gemelas, la Sala y la Trono, una de las cuales envejece mal. Además de la interpretación de Oriol Grau y Pau Ferran, cada representación cuenta con actores invitados que han sido vinculadas a la sala tarraconense durante su historia.
Los dos protagonistas se han mostrado muy satisfechos para la acogida de la obra, que confiesan que está generando momento «mágicos» en el escenario. «Está siendo muy emocionante; cada noche vivimos este tipo de duelo de mirarnos la sala por última vez con el público, pero yo lo estoy pasando a través de las funciones», ha valorado a Oriol Grau. Igualmente, el actor Pau Ferran ha apuntado que hacer este despido es «un placer» y que, además, el público se implica y se siente «protagonista».