CUP y ERC presentan mociones sobre sostenibilidad y la adecuación de l'N-340

Los grupos municipales de la CUP y ERC presentarán al plenario del próximo viernes, de manera conjunta, por una parte, una moción para garantizar el compromiso del Ayuntamiento de Tarragona hacia la reducción de emisiones y la lucha contra el cambio climático y, por otra, una moción que insta a que se efectúen las oportunas mejoras en la señalización y accesibilidad de la antigua carretera N-340 a su paso por el Levante de Tarragona, con el fin de promover la integración urbana, la seguridad vial y promover el transporte público y sostenible.

En la sesión del viernes, republicanos y cupaires defenderán la necesidad de luchar contra el calentamiento global mediante el despliegue del Plan de Acción de Energía Sostenible (PAES), que el Consistorio tarraconense ya aprobó en el 2008, y que prevé acciones municipales que se tienen que alcanzar antes del 2020. Este Plan preveía el despliegue, en tres fases, de las acciones encaminadas a alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de CO2. Paralelamente, el 31 de enero de este año, la Generalitat de Catalunya puso las bases del Pacto Nacional para la Transición Energética, con la voluntad de mejorar en la eficiencia energética industrial y de edificios.

Jordi Fortuny, concejal de Esquerra Republicana, y Laia Estrada, concejala de la CUP, recordaron ayer en rueda de prensa que los objetivos para el 2020 preveían una disminución de un 20% en gases de efecto de invernadero, mientras que actualmente el objetivo es alcanzar el 100% antes del 2050.

Para la portavoz de la CUP, Laia Estrada, la intención es «reestructurar el PAES para dar margen de acción en Tarragona». «Es un plan asumible y necesario», añadió, mientras que para el conseller Fortuny «hay los instrumentos y ahora lo que hay que hacer es aplicarlos y replantearlos de acuerdo con los objetivos».

Los dos concejales desglosaron las acciones más destacadas de este plan|plano, que prevé instalar luces de LED para reducir el consumo energético, llevar a cabo campañas de sensibilización energética en ámbitos educativos, o seleccionar un edificio emblemático (nuevo o para rehabilitar) para aplicar criterios bioclimáticos, con utilización de energías renovables y de emisión cero, entre otros.

El futuro de la antigua carretera

En último término, Estrada y Fortuny presentaron la propuesta de que les hicieron llegar desde la Federación de Asociaciones de Vecinos de Tarragona, la Asociación de Vecinos Tarragona Centro y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Levante para ser presentada ante el plenario del Ayuntamiento. Esta moción apuesta por el transporte público y la mejora y adecuación de la antigua N-340 a su paso por Levante, con respecto a elementos de seguridad y la inclusión de la vía en el entramado urbano. Por parte de ERC y la CUP, siempre se ha valorado muy positivamente la preservación del entorno de la playa Larga, pero reclaman, de acuerdo con la propuesta vecinal, que se instalen dos pasos de peatones semafóricos en Cala Romana y a Solimar, dado que la antigua carretera hace falta integrarla como vial urbano.

Las intervenciones propuestas también pasan por asegurar la viabilidad del transporte público, que se vería favorecido por la mejora de la seguridad de la calzada. Afirman que la apuesta por el transporte público tiene que pasar por hacer frente a las problemáticas de seguridad en vez de optar por el cierre de paradas|puestos.

Hay que recordar que desde la entrada en servicio de la autovía A-7 hace pocos años, el número de vehículos que circulan por la antigua N-340 se ha reducido y, desde varios sectores ciudadanos, se pide su conversión en una amplia avenida.