El Crist de les 7 Paraules sale en viacrucis después de ser restaurado
El Portal del Carro fue el inicio de una procesión que recorrió las calles de la Part Alta
La ermita de Sant Magí, en el Portal del Carro, vivió ayer la celebración de la Eucaristía, en un acto organizado por la Confraria de Sant Magí Màrtir de Barcelona, la Associació la Salle y la Reial Congregació del Venerat Cos de Jesucrist en el Descendiment de la Creu. Una vez finalizada, en torno a las 20 horas dio inicio el viacrucis que las tres entidades hicieron por calles de la Part Alta y que discurrió por espacios emblemáticos de la ciudad antigua como el Pla de la Seu. El Crist de las 7 Paraules, de la Associació la Salle, salió ayer por primera vez de viacrucis después de su restauración, tarea que fue bendecida el pasado viernes 7 de abril.
El viacrucis se inició en el Portal del Carro y, desde este punto, la comitiva religiosa se dirigió hacia el Arc de Sant Llorenç, Sant Pau, Pla de Palau, Mare de Déu del Claustre, Escrivanies Velles, Nou del Patriarca, Peixateries Velles, Mercè y Descalços, para volver en el Portal del Carro, donde finalizó.
Un pelotón de armados abrió la comitiva, en la que estaban presentes cofrades de otras entidades tarraconenses, además de miembros de las tres cofradías organizadoras del viacrucis. Unos metros más allá, apareció el Cristo de las 7 Paraules en la plaza del Escorxador, donde esperaban las primeras personas que se dieron cita a lo largo del recorrido para presenciar el viacrucis. Los participantes llevaron velas de pequeño formato, para dar más solemnidad al acto característico de la Semana Santa tarraconense.
Al llegar a la plaza de los Pagesos, la comitiva religiosa hizo la primera de las paradas, y reanudó el camino, en dirección al Pla de la Seu, unos minutos después. Unos metros más arriba, el arzobispo Jaume Pujol presidía un viacrucis que fue ganando en intensidad en la medida en que entraba la oscuridad de la noche a las calles de la Part Alta.
Una imagen inusual
Entre algunas de las personas que fueron a ver el viacrucis se comentó un hecho del todo singular que sucedió el Domingo de Ramos. Ciudadanos que en torno a las 11 horas de la mañana se encontraban en la Muralla y en el Portal del Roser vieron, sorpresos, como del Passeig Arqueològic salían los armados de la Sang en perfecta formación y, después, afrontaban la calle Cavallers a buen ritmo. Este hecho inusual tenía una explicación que para muchos no trascendieron. Los armados participaron en una sesión fotográfica, como contribución solidaria a un calendario que está elaborando una asociación de lucha contra el Alzhéimer. La presencia de los armados causó, sin duda, sensación entre los presentes, tan tarraconenses como aquellos que se encontraban en la ciudad haciendo turismo.
Música sacra en la Catedral
La jornada del lunes finalizó con el Ciclo de Música Sacra y la celebración del concierto que tuvo lugar en la Catedral. La Orquesta Simfònica del Vallès, una de las más renombrades de Cataluña, conjuntamente con el Cor de la Ciutat de Tarragona, interpretó la Missa de Glòria, de Giacomo Puccini. El acto fue organizado por la Agrupació d’Associacions de Setmana Santa, Joventuts Musicals, el Cor Ciutat de Tarragona y el Capítol de la Catedral.
Puccini compuso la Missa de Glòria el año 1880, cuando tenía 21 años. Fue, sin duda, una obra de juventud, que la hizo para orquesta y coro a cuatro voces mixtas con partes de tenor y de barítono solistas. El título original fue Missa en cuatro voces y orquesta, sin embargo, finalmente, derivó hacia el nombre actual de Missa de Glòria a causa de la importancia que se dio al segundo movimiento, la Glòria, que tiene una duración de casi la mitad de toda la obra.