Los campos de fútbol de Tarragona están en un estado pésimo
Lo denuncia el PDECAT, que exige que se ponga solución
El estado de los campos de fútbol de la ciudad de Tarragona no es, ni mucho menos, el ideal para que los jóvenes puedan desarrollar la actividad deportiva. Así lo ha denunciado el PDECAT mediante un comunicado, donde exige que se ponga fin a todos los problemas que comporta la dejadez en las instalaciones.
«El estado en que se encuentran la mayoría de estas instalaciones deportivas es lamentable», ha manifestado la concejala del Partido Demócrata, Cristina Guzmán, que ha señalado que «los numerosos desperfectos representan un peligro para los usuarios, la mayoría de ellos niños y jóvenes».
«Los banquillos de la mayoría de los campos de fútbol municipales están rotos y cutres; el césped artificial, inaugurado hace una década, está muy deteriorado; las rejas del alcantarillado de los campos están viejas y se rompen dejando agujeros al descubierto; muchos de los campos no tienen bastante foco de luz o una ineficiente instalación eléctrica; y numerosos vestuarios sufren humedades, goteras y puertas y ventanas rotas», ha resumido Guzmán.
La concejala también ha señalado que muchas de las vallas perimetrales de los campos están «totalmente oxidadas y rotas» como es el caso del campo de fútbol de Bonavista. «Por otra parte, el muro que rodea el campo de fútbol de La Floresta ya ha cedido en varias partes y se tendría que hacer de nuevo», ha recordado.
«Hay múltiples deficiencias», ha manifestado Guzmán, que también ha explicado que la grada del campo de fútbol de Bonavista está cediendo, ya que «la separación entre los bloques de hormigón cada vez es más pronunciada». «Bajo el césped del campo de fútbol de Icomar incluso encontramos raíces de árboles», ha señalado.