Alumnos de Educación reivindican su profesión en el campus Sescelades

«Desde que empezamos la carrera, las faltas de respeto y los comentarios despectivos han estado al orden del día. Siempre que vamos a la biblioteca a estudiar, alumnos de otros grados se ríen de nosotros». Así resumían la situación los alumnos de cuarto curso del Doble Grado de Educación infantil y Primaria de la Universidad Rovira i Virgili. Hartos de todo eso, esta semana decidieron colgar varios carteles en el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI) del campus Sescelades. «Revalorizadnos, estáis aquí gracias a los maestros», decía uno de los lemas que se podían leer.

La Asamblea de Educación de la URV ha dado apoyo a la reivindicación, argumentando que «las respuestas y las burlas recibidas no son más que un reflejo de la deriva de esta sociedad». Según los miembros de la Asamblea, «si no es productivo económicamente, no es válido». E invitaban a reflexionar diciendo que «eso lo crean los gobiernos o los que se enriquecen de este pastel, de acuerdo, pero que los estudiantes caigan en esta triste provocación...». Según defendían, «la educación tiene que ser una herramienta artística, de cambio, no una máquina de dinero y de homogeneización de pensamientos». Por último, expresaban el siguiente: «Todo el apoyo a los estudiantes de Doble Grado, que se atrevieron a salir del aula. Porque aprender también implica salir de la fórmula».

Los alumnos de cuarto curso se reunirán próximamente con el decano de la facultad porque «no queremos soportar más todas estas faltas de respeto». Según aseguraban, «mientras colgábamos el cartel, algunos alumnos se acercaban para hacer comentarios despectivos». Decían, incluso, que «cuando dejamos el cartel colgado, empezaron a enganchar cosas encima para cuestionar y reírse de todo lo que estábamos reivindicando».

Aunque la situación parece estar tensa, algunos alumnos de otros grados han hecho llegar muestras de apoyo a los estudiantes de Educación, argumentando que «no todos los estudiantes somos iguales, nosotros os creemos necesarios».