«La ambulancia no ha venido y me ha llevado al hospital el marido de la farmacéutica»

Modesto Pallejà, presidente de la Associació de Veïns de la plaza 1 de Maig, fue intervenido quirúrgicamente el pasado 5 de mayo y este miércoles, tenía que ir a hacerse una cura a consultas externas del Hospital Joan XXIII. La ambulancia que lo tenía que llevar al centro sanitario desde Torreforta «tenía que pasar a recogerme a las 8:30 horas y, como no venía y llegaba tarde en la consulta, me ha trasladado en su coche el marido de la farmacéutica». Como consecuencia de la operación en un pie, la cuarta, «en la cual me hicieron un injerto de hueso y me pusieron dos piezas metálicas, tengo que moverme en silla de ruedas porque no puedo poner el pie a tierra». Ayer, en el Joan XXIII, «me sacaron 32 grapas».

Pallejà se mostró «indignado» por la situación que vivió y declaró a Diari Més que «el servicio de ambulancia es una vergüenza». El presidente de la entidad vecinal explicó que «a las 8:15 ya estaba en la calle, preparada para que me vinieran a recoger a las 8:30, pero como no venía y llegaba tarde, ha sido el marido de la farmacéutica quien se ha prestado a llevarme al hospital cuando ya eran las nueve de la mañana». Pallejà remarcó que «me han dicho que la ambulancia estaba de camino, pero no sé si al final ha venido o no». «Lo que es seguro es que en el momento de marcharme yo hacia el Joan XXIII no estaba en su sitio», dijo.

Una vez finalizada la cura, Pallejà decidió presentar «un escrito de protesta ante la sección Atención al Usuario, pero estaba cerrada». Finalmente, «lo he podido hacer y la trabajadora que había en el mostrador del vestíbulo ha sellado el documento». En el escrito denunció que el de la ambulancia «es un servicio privado de vergüenza».

Modesto Pallejà informó a esta redacción de su intención de hacer llegar el escrito con la reclamación al presidente de la Federació d'Associacions de Veïns de Tarragona (FAVT) a Antoni Peco, y al de la Coordinadora d'Entitats de Tarragona (CET), Ángel Juárez, «porque situaciones como ésta no se tienen que permitir».

Precisamente, la semana pasada el presidente de la CET denunció a este medio los problemas que tuvo para ser trasladado a un hospital cuando llamó al 112 para informar que estaba sufriendo fuertes dolores, que, una vez en el centro asistencial, confirmaron que era resultado del infarto que estaba sufriendo en aquellos momentos». Juárez relató que «si lo que sufrí cuando me encontraba en casa hubiera sido un ataque agudo, me habría quedado en el lugar», y subrayó que «al preguntar por qué no había venido la ambulancia UCI, me dijeron que estaba ocupada».