Una cuarentena de cabelleras para generar toneladas de felicidad

Un aula transformada en peluquería. Un grupo de chicas espera, mientras observa con detenimiento la situación, en qué llegue su turno. Sentadas en el centro de la clase, tres chicas y un chico ya se está cortando el pelo. A fuera, algunas presumen de la cola que acaban de entregar por una buena causa. Otros, se miran en el espejo para comprobar que el desastre no ha sido tanto grande.

Este era el ambiente en una de las aulas de La Salle de Tarragona este jueves por la mañana. Gracias a una iniciativa de cuatro chicas de cuarto de ESO, el colegio ha vivido una jornada de solidaridad «en estado puro». Así lo aseguraba la profesora a Marina Torné, que se encontraba «emocionada y sorprendida» por el resultado del acontecimiento. Unos cuarenta alumnos de la escuela se ha cortado el pelo para darlos a chicas y mujeres que sufren cáncer. «No esperaba que hubiera esta respuesta. Los jóvenes a veces nos dan lecciones, y hoy lo han hecho», expresaba Torné.

La idea ha sido de Blanca Tous, una chica que vivió el cáncer de bien cerca. «Este verano, a causa de la enfermedad de mi madre, me corté el pelo para solidarizarme con ella», explicaba Tous. Al llegar a la escuela y saber que tenía que hacer un proyecto para una asignatura, no dudó al proponer su idea a tres amigas más, Blanca Dalmau, Alba Palomares y la Vicki Viana. «Estamos muy contentas. Ha salido mucho mejor de lo que esperábamos», aseguraban.

El requisito para participar en la jornada era simple: se tenían que cortar como mínimo 20 centímetros de cabellera. Todo el pelo que se ha recogido, se hará llegar a la Asociación Mechones Solidarios, una entidad que regala las pelucas a las niñas hasta 14 años y a las mujeres sin recursos.