Dar leche materna para salvar vidas
El Hospital Joan XXIII de Tarragona busca madres que quieran dar leche para los niños prematuros
En Cataluña nacen cada día dos bebés de riesgo que necesitan leche del Banco de Leche Materna de Cataluña para superar los primeros días de vida.
La leche materna es imprescindible para el desarrollo de los recién nacidos de bajo peso (entre 800 y 1.500 gramos) con riesgo de patología digestiva o intestinal, déficit inmunitario o una salud precaria. Sucede que, muy a menudo, sus propias madres todavía no tienen leche para alimentarlos. En Cataluña, estos niños pueden sacar adelante gracias a las donaciones que se recogen al Banco de Leche Materna, un ente creado en el 2011 que se nutre de las donaciones de madres que están amamantando a sus propios hijos. En nuestra demarcación estas donaciones se gestionan desde el Hospital Joan XXIII de Tarragona. Núria Vilanova, médico coordinadora de donaciones del Banco de Sangre y Tejidos de Tarragona y las Tierras del Ebro, apunta que, desde la creación del Banco, las donaciones han ido en aumento año tras año, pero en paralelo también han aumentado los casos de bebés prematuros, motivo por el que, asegura, la satisfacción es grande, pero también «efímera», porque las donantes de leche lo pueden ser en un periodo muy corto: los primeros doce meses de amamantamiento. Hacerse donante de leche materna es tan sencillo como ir al Hospital Joan XXIII y pedirlo.
Después de una entrevista previa y unas analíticas para descartar determinadas enfermedades, la donante recibirá un quit para sacarse la leche, y que incluye un sacaleches y un paquete de envases para conservarla. Una vez en casa, la donante sólo tiene que extraerse la leche y congelarla. El Banco de leche se encargará de pasar a recogerla por su domicilio.
Toda la leche recogida en las delegaciones de los Bancos de Leche de Cataluña se lleva a la central de Barcelona, donde se somete a un proceso de pasteurización que sirve para eliminar toda la carga microbiana. Además, la leche materna es analizada antes y después de esta pasteurización con el fin de certificar que la cantidad de grasas, hidratos de carbono y proteínas sigue siendo óptima. Después de todo este proceso la leche es distribuida por todo el país en función de las necesidades. Núria Vilanova explica que nunca se han encontrado sin reservas de leche, pero si fuera el caso, esta contingencia se resolvería gracias a los acuerdos con la Asociación Española de Bancos de Leche Materna.
Desde su creación el año 2011 el Banco de Leche de Cataluña ha alimentado además de 2.000 niños y niñas prematuros. El año 2016 se cerró con 621 donantes y 1.106 litros de leche distribuidos a 487 bebés. En el caso de Tarragona y las Tierras del Ebro, las madres donantes fueron 76, y los receptores, 90.
Así y todo, desde el Banco de Leche se hace un llamamiento para que las donaciones no cesen. «Está estudiado que, los bebés prematuros que toman leche materna en lugar de leche de fórmula, tienen un índice de supervivencia de 6 en 3. Este alimento es una medicina natural», asegura la doctora Vilanova