La AVDA Tarragona Centre cree más urgente rehabilitar la zona que hacer la Budellera
La entidad lamenta la existencia de edificios vacíos en la Rambla, teme por la marcha de gente joven a otros sitios y cuestiona el proyecto para el Banco de España
La Asociación de Vecinos Tarragona Centre plantea al Ayuntamiento, desde hace tiempo, varias actuaciones para evitar la desertización de la zona en un futuro no lejano, la rehabilitación de edificios vacíos a pesar de encontrarse en la Rambla Nova, la defensa del pequeño comercio y la introducción de mejoras como la creación de más zonas de peatones. La presidenta de la entidad, Núria Sabat, ha manifestado a Diari Més que «el Ayuntamiento tendría que tener más interés en abrir edificios del centro de Tarragona que están cerrados, como tres que se encuentran entre la calle Fortuny y el Balcó del Mediterràni, en lugar de favorecer intereses privados como|cómo la construcción de uno nuevo cierre en la Budellera, cuando dice que fallan viviendas para la gente joven, a la que, por otra parte, se está expulsando del centro de la ciudad». Sabat añadió que «la rehabilitación de viviendas también puede ser un buen negocio».
La presidenta de la asociación comentó que «no estamos encontrando una respuesta demasiado buena del gobierno municipal a nuestras propuestas, y sí que tenemos más de los partidos de la oposición». La entidad teme que el centro de la ciudad pierda habitantes en el futuro por falta de actuaciones, como la rehabilitación de edificios, de bajos comerciales y de la trama urbana, cosa que «no se hace en dos días, y sí poco a poco», dijo Sabat, quien considera «una barbaridad que en el centro de la ciudad haya edificios vacíos». «El Ayuntamiento no está por esta labor y lo que quiere es que salga adelante el proyecto de la Budellera», dijo.
La presidenta de la asociación subrayó que «hay bajos comerciales cerrados desde hace décadas». En opinión de la responsable de la entidad, «el Ayuntamiento tendría que hacer alguna cosa en el centro de Tarragona porque esta zona se está muriendo, urbanísticamente hablando» y dijo que, «si en un sitio como la Budellera haces una zona comercial que equivale en dos a El Corte Inglés, el comercio del centro ya puede bajar las persianas». «Al final, la parte antigua de la ciudad sólo servirá para hacer fiestas», recalcó Sabat.
La organización vecinal Tarragona Centre reconoce que, a menudo, mantiene contactos con representantes del gobierno municipal, pero el resultado que se desprende no es del todo satisfactorio. La asociación ve con buenos ojos el plano urbanístico que ha previsto ejecutar el Ayuntamiento. aprovechando la reapertura del edificio modernista del Mercado Central. No obstante, defiende la ampliación de la zona de peatones prevista. Núria Sabat dijo al respecto que «de ampliarse en calles como Fortuny, Soler o Cervantes, esta zona ganaría vida». «Parece –añadió– que el Ayuntamiento estaría de acuerdo, pero dice que no puede tener un calendario de ejecución por falta de recursos y que espera pague las obras la Generalitat».
Banco de España
Tarragona Centre no está conforme con la decisión de destinar el edificio del Banco de España a un centro de difusión del conocimiento. Sabat va manifsetar que «hipotecan 2.400 metros cuadrados con un proyecto que la ciudadanía no pide y que, según nuestra opinión, se destinará a cosas que no interesan a la gente de a pie, y al que irán cuatro turistas despistados y grupos de estudiantes de las escuelas».
La presidenta de la asociación remarcó que «nosotros presentamos un proyecto para hacer un centro interactivo, que se podría financiar con el alquiler de espacios como un restaurante que iría a la planta alta o unos bajos destinados a hemeroteca.»