Salud derrocará al Joan XXIII y hará un nuevo complejo de 80.000 metros cuadrados

El emblemático Joan XXIII de Tarragona desaparecerá del paisaje urbano de la ciudad. El Departamento de Salud ha anunciado este jueves los planes de futuro del hospital, que prevén su renovación casi de manera integral y el derribo de los edificios más antiguos. Sólo se conservará una cuarta parte del actual centro hospitalario. El conseller Antoni Comín ha detallado que el futuro complejo sanitario, con un techo de 80.000 metros cuadrados -20.000 más de los que tiene ahora-, se desarrollará en tres fases. La primera consistirá en la construcción de un nuevo edificio de 40.000 metros cuadrados en unos terrenos adyacentes que son propiedad del ICS, con una inversión de 48,5 MEUR. Posteriormente, se irán derribando los edificios «obsoletos» y los servicios que ofrecían se irán trasladando a edificios de nueva creación hasta disponer de un recinto completamente «funcional y arreglado».

El conseller ha explicado que el Gobierno construirá «un nuevo Hospital Joan XXIII» y que el actual complejo sanitario se renovará prácticamente de manera integral. «Del qué es el actual hospital, sólo quedará aquello en que tiene un estándar constructivo, tecnológico y asistencial de valor, que está donde estamos haciendo todas las nuevas inversiones en este momento -el edificio C-», ha resumido.

Comín ha justificado la nueva actuación por el hecho de que los dos edificios de la fachada histórica, denominados B1 y B2, se encuentran en una situación funcional y constructiva compleja. «Hay una obsolescencia importante de estos edificios, que en el siglo XXI no pueden ofrecer garantías de calidad para un hospital terciario como es el Joan XXIII. Hay una razón de cierta urgencia en esta renovación», ha asegurado.

Un proyecto que se desarrollará en tres fases

El nuevo complejo sanitario del Hospital Joan XXIII, previsto en el Plano Estratégico Sanitario (2016-2020) de la Región Sanitaria de Tarragona, se articulará en tres fases y tiene el objetivo final de reforzar el equipamiento tarraconense como «un centro de cabecera» asociado a la investigación. Está previsto que el hospital del futuro disponga de un total de 80.000 metros cuadrados de superficie, un 25% más que el actual.

Este año ya se abrirá un «ambicioso» concurso de ideas para que los equipos de arquitectos aspirantes planteen su propuesta integral sobre el conjunto de las tres fases constructivas. Posteriormente, el año 2018 se llevará a cabo la redacción del proyecto ejecutivo y se allanará el camino para empezar a levantar el primer sector proyectado.

En la primera fase, entre los años 2019 y 2021 se construirá un edificio de 40.000 metros cuadrados en el espacio que actualmente ocupa el helipuerto y el parking del personal. La inversión, ya reservada en las cuentas de la Generalitat, se enfilará a los 48,5 MEUR. Inicialmente, sólo se habilitarán 25.000 metros donde se trasladará toda la actividad que se ofrece actualmente en los viejos edificios, el B1 y el B2, que quedarán vacíos. Entre estos, hay seis unidades de hospitalización, con 36 camas cada una.

En la segunda fase, se procederá al derribo de la emblemática fachada, formada por el B1 y B2; se trasladarán el bloque quirúrgico y el área de diagnóstico por la imagen -que ahora se encuentran en el edificio C- a los 15.000 metros pendientes de ocupar del nuevo edificio; y finalmente se construirá un nuevo inmueble de 10.000 metros para usos ambulatorios y de consultas, que hasta ahora estaban dispersas por todo el recinto.

En la tercera fase, se prevén construir dos nuevos bloques con 10.000 metros cuadrados más. El primero comportará el derribo del antiguo edificio de Infermeria y será adyacente al nuevo espacio de 40.000 metros cuadrados. En segundo lugar, el otro estará ubicado en el espacio liberado en la actual fachada y se dedicará a espacio de docencia y hospital universitario. Asimismo, en esta fase también se derribará el actual edificio de consultas externas.

De esta manera, el futuro hospital dispondrá de una fachada posterior, por la banda asistencial, y otra por la banda urbana, con los espacios de investigación, que según el conseller es «una buena manera de relacionar el hospital con la ciudad». «Hablamos de una estructura muy funcional, muy arreglada y de un hospital muy racional, en qué no se mezclarán espacios», ha resumido Comín. El conseller ha añadido que, en definitiva, se trata de ofrecer a los profesionales el espacio y las tecnologías necesarias para que puedan desarrollar su talento.

Por su parte, el gerente territorial del ICS, Rafael Gràcia, ha señalado que el nuevo hospital no prevé un incremento de camas|lechos porque se apuesta por las alternativas a la hospitalización. En este sentido, ha defendido que la tendencia se dirige a resolver las patologías en los domicilios o en el área ambulatoria y sociosanitaria, así como potenciar el hospital de día para reducir la estancia media de los pacientes.

Por otra parte, el conseller ha puesto en valor que el hospital crecerá hacia terrenos que fueron cedidos por el Ayuntamiento al Servicio Catalán de la Salud. «Eso nos permite, prácticamente por primera vez, construir un hospital del ICS en terrenos de la Generalitat», ha celebrado Comín. Actualmente, ha recordado, los principales centros del país están construidos en terrenos de la Tesorería General de la Seguridad Social, por|para lo cual «hace décadas» que pedimos la transferencia a la Generalitat.

Nueva UCI pediátrica en octubre

El edificio C, con 20.000 metros cuadrados de superficie, es lo único que quedará de pie del actual hospital y es el que acoge las inversiones más recientes, como la segunda fase de las Urgencias y la reforma de la Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA), con una inversión de 2,5 y 2,8 millones de euros, respectivamente.

En octubre se añadirá la esperada UCI pediátrica, que dispondrá de seis box. Las obras ya están terminadas y se priva pendiente del equipamiento. En conjunto, la inversión será de 1,47 millones de euros para recuperar este servicio que el hospital perdió el año 2001. «Dispondremos de un espacio al nivel de las mejores UCI pediátricas de Cataluña en aparatos y en utilidad asistencial», ha señalado Comín, quien ha puesto en valor que con la nueva UCI se cerrará «un capítulo incómodo» del hospital.

Los planos de la remodelación se pueden ver a través de este ENLACE.