La Guardia Urbana ya recibe las imágenes de las cámaras de la Parte Baja

Las veinte cámaras de seguridad instaladas en calles del barrio de la Parte Baja remiten las imágenes en la sala de control de la Guardia Urbana desde el pasado lunes. Esta es una antigua reivindicación de los vecinos de la zona, que empezó cuando la actividad lúdica en los establecimientos del Puerto Deportivo llegó al máximo nivel, ahora hace unos años. La próxima actuación será la instalación de las videocámaras que vigilarán en el paso subterráneo de la plaza de los Carros, un espacio que, especialmente por la noche, está poco protegido para las personas que lo utilizan.

Fuentes de la Guardia Urbana informaron ayer a esta redacción de que las cámaras ubicadas en varias calles de la Parte Baja, como Apodaca, han entrado en funcionamiento esta semana, una vez se recibió la autorización judicial pertinente.

El intendente mayor de la Guardia Urbana, Enrique Fernández, dijo en la rueda de prensa posterior a la Junta Local de Seguridad, reunida ayer, que cuando se pidieron las cámaras de vigilancia había mucha actividad en la zona del Puerto Deportivo, hecho que comportaba la existencia de más conflictividad, una situación que fue disminuyendo en la medida en que la afluencia de personas a la zona lúdica portuaria se redujo de manera drástica.

La instalación de las cámaras se contempló en dos fases, la que ya ha entrado en funcionamiento y la que corresponde al pasillo subterráneo de la plaza de los Carros y que permite superar el trazado ferroviario a pie. La siguiente actuación será, precisamente, conectar las cámaras que afectan al paso soterrado y que se hará en un corto plazo de tiempo, dado que ya han llegado los permisos para proceder a su conexión con la sala de control de la Guardia Urbana.

Hasta la entrada en funcionamiento, ha pasado mucho tiempo desde la colocación de la primera de las veinte cámaras, hecho que sucedió el 12 de abril del año pasado en la calle Comerç. El conjunto de cámaras están localizadas en varios puntos de la Parte Baja. Las calles afectadas son Apodaca, Orosi, Cartagena, Sant Magí, Rebolledo, Pau del Protectorat, Unió, plaza de los Carros, Real, Anselm Clavé, Comerç, Barcelona y Arquitecte Rovira. El presupuesto que se aprobó en su momento ascendía a 167.600 euros.

Con la entrada en funcionamiento de las cámaras se espera una mejora en la seguridad en el barrio, sobre todo con respecto a los ataques vandálicos que sufre el mobiliario urbano de la zona.