Tarragona creará cuatro nuevas bibliotecas en los barrios
El Mercado de Torreforta se remodelará para ubicar la Biblioteca de Torreforta, actualmente situada en el Centro Cívico del que depende
La ciudad de Tarragona tendrá, en el 2022, cuatro nuevas bibliotecas situadas en diferentes barrios. Así lo contempla el Plan de Bibliotecas 2018-2022, aprobado el pasado jueves 29 de junio por la Comisión informativa de Cultura, el cual prevé dotar la ciudad de un servicio de bibliotecas de acuerdo con las previsiones del mapa bibliotecario de la Generalitat de Catalunya.
El plan contempla la transformación del Punto de lectura de Sant Pere i Sant Pau en una biblioteca, así como la creación de una biblioteca en Sant Pere i Sant Pau, una en la Parte Baixa y otra en la Parte Alta. Eso supone cuatro nuevas bibliotecas en la ciudad, que se sumarán a la Biblioteca Pública -de titularidad estatal y gestionada por la Generalitat- y a la Biblioteca de Torreforta. Con respecto a este último equipamiento, el plan prevé trasladarlo del centro cívico donde está ubicada al Mercado de Torreforta, que se remodelará. Por último, también se creará el Servicio Municipal de Bibliotecas del Ayuntamiento de Tarragona, el cual gestionará y coordinará los futuros equipamientos.
En estos cinco años se priorizará, en primer término, la adecuación del Mercado de Torreforta con un presupuesto para el 2018 en remodelación y rehabilitación de 4oo.000 euros. En el 2019 se construirá la biblioteca de la Part Alta -previsiblemente en el Seminari-, mientras que entre el 2020 y el 2022 se crearán los equipamientos de la Part Baixa, Sant Salvador i Sant Pere y Sant Pau. La biblioteca de la Part Baixa se prevé ubicar en el Serrallo, sobre el local de los Xiquets del Serrallo. Con respecto a las de Sant Salvador y Sant Pere i Sant Pau, el Ayuntamiento está en contacto con Ensenyament para aprovechar espacios de escuelas e institutos. Con el fin de llevar a cabo el plan se destinarán un total de 9,7 millones de euros.
Con el fin de sacar adelante la aprobación de este plan, el conseller de Cultura, Josep Maria Prats, presentó un informe económico y de viabilidad llevado a cabo en los últimos meses que presenta el desarrollo técnico y a corto, medio y largo plazo de todas las fases que se tendrán que ir siguiendo. Al mismo tiempo el informe argumenta que «hace falta elaborar un plan de lectura pública, con el objetivo de convertir Tarragona en una ciudad lectora», que vaya acompañado de estas nuevas instalaciones y coordinado desde el nuevo Servicio, adscrito a la concejalía de Cultura.
Todos los equipamientos tendrán que disponer de un espacio de 1.000m2 aproximadamente, así como un equipo de trabajadores, una dotación importante de fondo bibliográfico, así como mobiliario y material informático, una programación paralela de animación a la lectura y todos los gastos de funcionamiento y mantenimiento propios de unas instalaciones de estas características.