Tarraco Viva tendrá un espacio específico destinado a las mujeres en el mundo antiguo
La concejala Begoña Floria reivindica la figura de mujeres de la Tarragona romana como la sacerdotisa Fulvia Celera
La edición de Tarraco Viva del 2018 aportará como gran novedad la creación de un espacio destinado, de manera permanente, a las mujeres en el mundo antiguo. Esta iniciativa, impulsada por la concejala de Patrimoni, Begoña Floria, prevé incorporar temáticas vinculadas a este segmento social menos conocido, en todas las ediciones del festival de reconstrucción histórica de Tarragona. Mujeres del mundo clásico aportará datos históricos y lo hará a través de formatos diferentes, como conferencias, debates, monólogos teatralizados, etcétera, ha informado Floria a esta redacción. «Esperamos que este nuevo campo de divulgación histórica, dentro de nuestro festival, contribuya a dar una visión de la historia más ancha y enriquecedora», ha remarcado la concejala.
En la edición de este año de Tarraco Viva y, también, en las recreaciones de la propuesta Tarragona Història Viva de este verano, los espectadores han podido descubrir un mundo poco conocido, como es el de las mujeres gladiadoras, un ámbito que el grupo de reconstrucción Tarraco Lvdvs ha llevado a la arena del Anfiteatro.
Floria quiere reivindicar, igualmente, el nombre de mujeres que jugaron un papel destacado en la evolución de Tarraco y del mundo clásico. La concejala de Patrimoni ha explicado que «paseando por las callejuelas de la Part Alta, se pueden ver algunas inscripciones romanas incrustadas en las paredes de casas y edificios. Hay una inscripción, la de la calle de la Destral, que por su situación al nivel del suelo, a menudo pasa desapercibida. Es una inscripción a honor de Fulvia Celera, una mujer de Tarraco que, siendo propietaria de tierras y esclavos, llegó a ser flamínia (sacerdotisa) perpetua de la ciudad. Un honor muy importante y bastante excepcional para una mujer». «Su marido, Caius Vibo Latro –añade Floria-, también fue nombrado sacerdote de culto imperial, pero en este caso y contrariamente a la norma, fue gracias a su mujer. Tenemos, pues, en nuestra casa, un documento de la visibilidad femenina en un mundo elitista, clasista y masculino».
El festival Tarraco Viva «se propone crear un nuevo espacio de programación dedicado a dar voces a las mujeres de la antigüedad, unas voces que nos hablan de mujeres científicas, poetisas, sacerdotisas, propietarias, reinas y no sólo de madres, hijas y esposas», dice Floria.
La concejala hace referencia al contenido del libro Diosas, rameras, esposas y esclavas. Mujeres en la antigüedad clásica, de la historiadora Sara Pomeroy, donde escribe «la producción intelectual y artística de Atenas fue, hace falta admitirlo, deslumbrante. Pero, raramente, ha habido una discrepancia tan grande entre los hitos culturales que una sociedad ha podido ofrecer y la participación de las mujeres en esta cultura». Pomeroy se plantea preguntas como «¿escuchó nunca Xantipa los diálogos de Sócrates sobre la belleza y la verdad? ¿Cuántas mujeres leyeron realmente las historias de Herodoto y de Tucídides? ¿Qué hacían las mujeres en lugar de eso? Y lo que es más importante, ¿por qué parecía tan importante para los atenienses el hecho de establecer una diferencia tal entre la cultura de los hombres y la de las mujeres? Cuando las diosas paganas eran, a su modo, tan poderosas como los dioses, ¿por qué el status de las féminas humanas era tan bajo?».
Floria observa que «este texto de Pomeroy nos ilustra sobre un problema general que afecta a nuestra visión del pasado clásico. Si mayoritariamente las fuentes históricas están hechas y hablan de las clases dirigentes, también es una distorsión de la historia el hecho de que sólo hayan sido hombres quien han hecho oír sus voces. Podríamos pensar que en realidad sólo sabemos cosas del pasado en un porcentaje mínimo de una élite masculina». La concejala de Patrimoni añade que «oír las voces de las mujeres del mundo antiguo es una necesidad si queremos entender realmente aquello que fue la vida social, política y cultural del mundo clásico».