El futuro Jardín Bíblico de Tarragona empieza a tomar forma
Este sábado se ha iniciado la primera fase de acondicionamiento del espacio
El Museo Bíblico Tarraconense ha dado el primer paso para la futura apertura del Jardín Bíblico que acogerá el patio del edificio que acoge el museo. Este sábado se ha dado el pistoletazo de salida a la primera fase para acondicionar la zona con la colocación de dos elementos muy pesados.
Con una grúa|grulla y desde la calle de las Coques se ha instalado una estatua del obispo Sant Fructuós, obra del tarraconense Bruno Gallart. La escultura, realizada con mármol travertino y carrara tiene un peso de cerca de 1.300 kilos. Además, también se ha colocado en el interior del patio un olivo centenario, el primero de los árboles que integrarán el futuro Jardín Bíblico. Los dos elementos se han colocado por el agujero del patio interior de manera aérea gracias a la gran grúa.
El nuevo espacio del Museo Bíblico pretende convertirse en una zona de reflexión y diálogo. Además, también está previsto que se convierta en escenario de actividades de formación de cultura religiosa y de descubrimiento interreligioso.