Los patinadores denuncian la «masificación» y el «mal uso» del skatepark
El Club Skateboard Tarragona se ha reunido con el consistorio para intentar encontrar una solución
Los patinadores tarraconenses denuncian la «masificación» y el «mal uso» que se hace del skatepark de Tarragona, ubicado en el Parc del Francolí. El Club Skateboard Tarragona, fundado hace unos meses, se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento, concretamente con la concejalía de Deportes, para poner remedio. «Se nos hace casi imposible patinar porque está lleno de gente que pasea o se sienta a los módulos, y también de niños pequeños que no son conscientes del peligro que implica estar dentro del skatepark cuando patinan jóvenes o personas mayores», explicaba el vicepresidente de la entidad, David Sanz.
El skatepark de Tarragona está compuesto de dos zonas: la primera que se construyó está formada por cuatro módulos –dos rampas, una barandilla y un módulo central con un margen de un metro de altura–, mientras que la segunda zona, construida posteriormente, tiene una gran variedad de módulos –bancos, barandillas y rampas– pensados exclusivamente para patinadores con un nivel más adelantado. Ya hace unos meses que los patinadores denuncian que «no podemos patinar ni en nuestra casa», pero un episodio violento el pasado viernes ha acabado con su paciencia, motivo por el cual hicieron un comunicado en las redes sociales.
«Había un hombre sentado en un módulo. Le dijimos, educadamente, si podía salir de allí porque queríamos utilizar el módulo para patinar. El hombre empezó a amenazarnos violentamente y a decirnos que tenía todo el derecho del mundo a sentarse allí. Finalmente, conseguimos poner paz, pero es una situación que se repite día tras día», detallaba Sanz, testigo del conflicto.
Los patinadores han propuesto al Ayuntamiento instalar dos carteles para aclarar cuál es el uso del skatepark. «Queremos recomendar que los usuarios con poca experiencia patinen en el skatepark más pequeño, el primero que se construyó, y que, en el otro, puedan patinar libremente los usuarios más expertos», expresaba Sanz. Además, quieren dejar claras algunas indicaciones, como que está prohibido comer, tirar basura o sentarse en la zona de los módulos. «¿A quién se le ocurriría sentarse en medio de un campo de fútbol? Pues en un skatepark es exactamente lo mismo», decía Sanz.
Por otra parte, los patinadores quieren hacer un llamamiento al «juicio». Son muchas las veces que decenas de niños en patinete acceden a la zona de patinadores. «Los padres no son conscientes de que cualquier choque con un skater más mayor les puede provocar lesiones», subrayaba Sanz, que añadía que «cuando nos tiramos desde una rampa nos es imposible frenar a tiempo». Habrá que ver como evoluciona la situación las próximas semanas y si la concejalía de Deportes acepta la propuesta del Club.