Decenas de personas custodian al Martí i Franquès de Tarragona a la espera de una posible intervención policial

Decenas de personas se mantienen este domingo por la tarde en el patio del instituto Antoni de Martí i Franquès de Tarragona para protegerlo de una posible intervención policial. Familias enteras, grupos de amigos y ciudadanos se reúnen en el patio, donde algunos han aprovechado para comer. En este punto de votación, cinco de las siete mesas funcionaban con normalidad al mediodía, excepto algunas interrupciones puntuales de las aplicaciones que se utilizan para introducir los datos de los votantes. Centenares de personas han inundado las instalaciones desde las nueve de la mañana y, a pesar de algunos ratos de larga espera en que se han interrumpido las votaciones, han podido ejercer su derecho. Observadores internacionales han hecho acto de presencia en el centro. Mientras tanto, el centro continúa con las actividades de puertas abiertas que ha organizado en esta jornada, como ahora un taller sobre como votaban los romanos. A las nueve, una sesión de yoga recibía a los ciudadanos en el patio. Este colegio electoral está situado junto a la comisaría de la policía española, donde se registra un intenso tráfico de furgones policiales que se desplazan por todo el territorio para requisar el material del referéndum.