El Ayuntamiento sustituirá 285 farolas «oxidadas» del centro de la ciudad

El Ayuntamiento de Tarragona está en proceso renovar los puntos de luz de las calles de la ciudad. Con el Plan de Mejora del Alumbrado, el consistorio tiene el objetivo de iniciar la sustitución de las farolas que han quedado obsoletas y no cumplen con la normativa de contaminación lumínica. Además, también hará desaparecer todos aquellos que están «oxidados». Una de las acciones de este plan será la sustitución de los puntos de luz de las calles del Mar, Vapor hasta la plaza de los Niños, Castellarnau, Francesc Bastos, Mallorca y Ramon y Cajal. Estas farolas «presentan problemas de oxidación» provocadas, en la mayoría de los casos, por los «orines de los perros y también por la lluvia», según informan fuentes municipales. La nueva iluminación será con tecnología led y contará con un refuerzo en la base de la farola para precisamente evitar oxidaciones y así conseguir que tengan una duración más larga.

Por otra parte, Cala Romana también verá sustituidas las 217 lámparas de vapor de mercurio. El Ayuntamiento, desde principios de este año, ha ido adecuando el alumbrado público a la nueva normativa de protección contra la contaminación lumínica. «Gradualmente –explica el concejal José Luis Martín- vamos cambiando esta tecnología obsoleta para farolas de menos consumo y más respetuosas con el medio ambiente». Actualmente, en Tarragona, el 7 por ciento de las farolas de la ciudad son de vapor de mercurio.

La adjudicación está prevista a finales de este año y, por lo tanto, estarán instaladas durante el primer trimestre de 2018.