Una pelea multitudinaria en Pau Casals reactiva las críticas vecinales
Sucedió a las puertas de una reconocida discoteca y las dos asociaciones de vecinos de la zona quieren una solución conjunta
Madrugada de sábado a domingo. Una de las discotecas más reconocidas de Tarragona cierra sus puertas después de una noche de fiesta. En la calle, como acostumbra a ser habitual, se concentran varios grupos de jóvenes antes de marcharse a casa. De repente, una pelea sorprende los presentes. Según han explicado a este medio algunos testigos, un joven sin camiseta y varios individuos más empezaron a golpear a muchas personas. También una chica, que recibió golpes hasta la llegada de la Guardia Urbana. Se desconocen, todavía, los motivos del conflicto. El resultado fue el siguiente: ocho personas identificadas, una persona atendida por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), ninguna denuncia hasta el momento y unos vecinos que han visto cómo, después de un año sin conflictos, el malestar vuelve a la calle Pau Casals.
Corrían las seis menos cuarto de la madrugada cuando, según relatan los testigos, un joven con la camisa rota empezó a golpear a varias personas. Recorrió los pocos metros que hay entre la mitad de Estanislau Figueres y la puerta de la discoteca «mucho alterado» y pegó «a todo el mundo que se encontraba por el camino». La disputa se alargó durante más de un cuarto de hora. Uno de los momentos más tensos llegó cuando «el chico sin camiseta y dos amigos suyos tiraron al suelo a una chica y le dieron varias patadas mientras un grupo de amigas lo insultaba».
«Desconozco los motivos de la pelea, pero no pararon de golpearla hasta que llegó la Guardia Urbana», asegura la testigo. Aunque sólo ocho personas fueron identificadas por los agentes de la Guardia Urbana, los testigosaseguran que «hubo más individuos implicados». Finalmente, sólo una persona tuvo que ser atendida porla ambulancia, pero sin la necesidad de ser trasladada al hospital.
«No fue el griterío habitual de un sábado por la noche», asegura una vecina de la zona. El chaflán entre la calle Pau Casals i Estanislau Figueres ha sido, tradicionalmente, uno de los espacios de ocio más reconocidos de la ciudad de Tarragona. Y como acostumbra a pasar en las puertas de las discotecas, decenas de personas se reúnen cuando el local acaba de cerrar. «Pero ahora hacia más de un año que no pasaba nada de lo normal», reitera la presidenta de la Asociación de Vecinos de la avenida Maria Cristina, Carme Solè. Lo mismo expresa a la presidenta de la Asociación de Vecinos Tarragona Centro, Núria Sabat, quien asegura que «aunque no es excesivo, el ruido es habitual los sábados por la noche».
Cuando tuvo lugar la última pelea hace más de un año, ambas asociaciones y Ayuntamiento se reunieron para buscar una posible solución. Además, y tal como asegura Solè, la relación con el dueño de la discoteca no se ha roto nunca. «Él lo tiene muy controlado dentro y tiene seguridad en la puerta. El problema llega cuando la gente sale del local», manifiesta Solè.
A lo largo de esta semana, las juntas de las asociaciones de Maria Cristina y Tarragona Centre se reunirán para elaborar un escrito donde se pidan explicaciones y donde se intente dar una posible solución a la problemática. «Quizás lo más adecuado sería que una patrulla de la Guardia Urbana pasara por delante de la discoteca cuando acaba de cerrar sus puertas, pero es sólo una opinión personal», expresa Solè.