El Ayuntamiento legaliza una permuta doce años después de realizarla

El Ayuntamiento de Tarragona aprobó, el pasado 29 de septiembre, iniciar el proyecto de regularización de fincas entre una porción de terreno particular y otra de municipal. Los vecinos de la comunidad de propietarios del Edificio Albatros, de la calle Tenerife de Torreforta, hace doce años decidieron intercambiar terrenos con SMHAUSA (Servicio Municipal de la Vivienda), para facilitar la construcción de unos cocheros a iniciativa de esta empresa municipal. Desde entonces, estaban esperando esta regulación.

El edificio de cocheras y de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de la calle Tenerife se encuentran en unos terrenos que habían formado parte del campo de fútbol municipal de la Cultural Torreforta. Cuando se hizo un cambio de orientación del terreno de juego, para hacerlo en paralelo en la calle Tenerife, SMHAUSA se dio cuenta de que tendría dificultades para construir, en el solar resultante, las cocheras porque una de las esquinas era propiedad de la comunidad de vecinos. En caso de no haberse hecho la permuta, ahora una de las puertas de acceso, la número 3, no existiría por falta de espacio.

«Es esperanzador conocer esta noticia porque parecía que eso se acabará algún día», expresaba al secretario de la comunidad de vecinos, Manuel Escudier. Después de más de una década esperando, Escudier celebraba la aprobación del consistorio, pero no con todas las garantías. «Todavía no es real del todo», decía. Sin embargo, se mostraba «satisfecho» y aseguraba que «eso tenía que llegar porque el Ayuntamiento llevaba una década incumpliendo la normativa».

Fue en el 2007 cuando esta comunidad dio entrada en el Registro del Ayuntamiento, con el número 8.153, la aceptación de permuta de superficie planteada y solicitada verbalmente a los miembros de la junta por los responsables de SMHAUSA, ante el problema de accesibilidad de los vehículos en el interior del nuevo edificio de cocheros por falta de espacio. Además, Escudier recordaba que esta demora los afectaba fiscalmente. Ahora, tendrán que esperar la aprobación definitiva y los vecinos firmarán un documento para dar el visto bueno.