«Queremos que las personas que tienen documentación gráfica, escrita u oral nos la traigan»

—¿Qué época queda recogida en la exposición fotográfica que inauguran este viernes al Arxiu?

—Nuestra pretensión es recorrer la historia de los más de cien años que hace que en Tarragona hay entidades dedicadas al excursionismo. Eso no coincide exactamente con la vida del Centre Excursionista Tarragona, porque su nacimiento es posterior. La muestra tiene como punto de partida el año 1895, cuando se funda en Tarragona la Sección Excursionista del Ateneu Tarraconense de la Classe Obrera, y es la primera sección de excursionismo que hubo en la ciudad. El CET nace el año 1972, por la fusión del Grupo Excursionista Muntanyenc (1923) y la Agrupació Excursionista Ginesta (1929).

—¿Qué nos muestran, las fotografías de aquella primera época?

— Hay muy antiguas que no las hemos podido poner porque han perdido mucha calidad. Pero la gran diferencia con respecto a hoy día es sobre todo la vestimenta de los excursionistas, las maletas, la corbata que llevan... Pero en realidad el resto de cosas no han cambiado tanto. Lo que sí que en aquella época era muy diferente era la vida asociativa. Como no tenían los medios de comunicación que tenemos ahora, había más necesidad de encontrarse. Con respecto a las salidas, solían hacer cosas cerca de casa, rutas próximas a Tarragona o Reus, como mucho hacia el Priorat, pero poca cosa más.

—¿Qué cantidad de material tenían y cómo se ha hecho la selección de las fotografías que finalmente estarán expuestas?

—Teníamos muchísimas fotos. El propio Arxiu también tenía material. Decidir cuáles escogíamos ha sido un poco complicado, pero hemos partido de la idea de seguir el hilo temporal desde 1895. Después también hemos seleccionado aspectos concretos que quizás dan más valor a la foto, como la dificultad de una ascensión. También es de destacar todo el material aportado por la familia Lerín, quién fue uno de los más importantes excursionistas de los años 30 hasta los 60, y que hizo muy buena trabajo, con fotografías muy interesantes. Ellos darán material al Arxiu, igual que también lo haremos nosotros, tanto documentación gráfica como escrita.

—¿Con esta exposición les ha servido para dar un repaso exhaustivo de la historia del excursionismo local?

—Lo que mostramos son imágenes que forman parte de nuestra historia, pero también hay muchas que se han perdido. Hace poco me escribió una señora para decirme que su padre había trabajado con el Muntanyenc en la construcción del refugio. Le dije, «pues eso es oro, venga y explíquelo, y si tiene fotos, traiga». Lo que quiero decir es que también queremos que esta exposición llame la atención de la gente para que quien pueda aportar más documentación gráfica, escrita y oral, venga. A nosotros nos interesa mucho.

—Y con todas estas fotografías recogidas para la exposición y todo el trabajo de investigación que se ha llevado a cabo para montarla, ¿prevén elaborar algún tipo de material divulgativo?

—Sí, precisamente nos interesaría mucho que alguna persona que, por ejemplo esté estudiando Historia, pueda coger todo este material para hacer, por ejemplo, un trabajo de fin de carrera. No hay nada publicado, y nos gustaría mucho que alguien se enganchara. Los inicios del excursionismo en Tarragona, por ejemplo, son muy diferentes de los de Reus o Barcelona. Aquí arranca de una base obrera, mientras que en las otras dos ciudades el movimiento tiene un origen más burgués. Pensamos que este tipo de información se podría trabajar más, y por eso querríamos que alguien lo coja y pueda hacer un trabajo más extenso y elaborado. Aprovecho para hacer un llamamiento desde aquí a las personas que puedan estar interesadas.