El Ayuntamiento prevé recibir el proyecto del Imperial Tarraco este mes
El hotel, adquirido por Alta Diamond Project en el Grupo Husa, será sometido a una profunda reforma y podría abrir a finales del 2018
El proyecto de reforma del Hotel Imperial Tarraco podría estar encima de la mesa de trabajo del concejal de Territori de l'Ajuntament de Tarragona antes de que finalice este el mes de noviembre. El concejal responsable del área, Josep Maria Milà, ha manifestado en esta redacción que la nueva propiedad del establecimiento del paseo de las Palmeras, Alta Diamond Projects, tiene previsto presentar el proyecto «antes de un mes». Este procedimiento es básico para poder pedir la licencia de obras.
Por otra parte, el proyecto tendrá que ser supervisado por la Comisión Territorial del Patrimonio Cultural de la Generalitat, que valorará la incidencia en que la reforma del hotel puede tener en el entorno patrimonial que configuran monumentos como el Anfiteatro, el Circo y la Torre de las Monjas. Milà ha apuntado que la reforma se hará en el interior del edificio y casi no afectará a la fachada del inmueble, por lo cual se prevé que el proyecto no tendrá ninguna dificultad para superar el dictamen de la Generalitat. Milà ha remarcado que no se trata de construir un edificio de nueva planta, sino de rehabilitar el existente.
El presupuesto de las obras se estima que será de unos 8 millones de euros y su duración podría situarse en torno a los quince meses. El objetivo de la nueva propiedad es modernizar un hotel que, con el paso del tiempo, había envejecido y quedó desfasado, como manifestaron en esta redacción los últimos turistas que hicieron noche en sus instalaciones el 21 de mayo pasado.
El establecimiento, que había sido propiedad de la cadena hotelera HUSA, fue subastado en diciembre del 2016 y, como no compareció ningún comprador, pasó a manos de su principal acreedor. El pasado mes de mayo, la nueva propiedad –una inmobiliaria– presentó una demanda de cese de la actividad ante un juzgado de primera instancia de Tarragona. Este fue el final de un llag proceso abierto por Joan Gaspart, máximo responsable del Grupo Husa, que se ha desprendido de hoteles míticos, como el Ritz de Barcelona, para hacer frente a las deudas acumuladas. En el 2015, Husa debía 153,3 millones de euros a varios acreedores, entre los cuales destacaban Banc Sabadell, La Caixa, el Instituto Català de Finances (ICF) y Banco Popular. Desde hace tiempo, Gaspart intentaba sacarse del encima del Imperial Tarraco, cosa que finalmente consiguió por la compra del edificio por parte de Alta Diamond Projects. Husa inició su política de desprenderse de los hoteles de la cadena hace años. Sin ir más lejos, este 2017 ya han conseguido salir de la cadena el Husa Tuca (Vielha), el Husa Orri (Tredòs) y el Husa Imperial Tarraco.
El negocio del Grupo Husa arrastra una profunda crisis desde inicios de este siglo. El 2011 fue un año especialmente duro, ya que se vendió el Hotel Palace Barcelona, el más emblemático de la familia Gaspart, a unos inversores británicos por el precio de 68 millones de euros. En esta ocasión, sin embargo, el Grupo Husa se quedó con la gestión. Por aquellas fechas, la empresa dirigida por Joan Gaspart también puso en venta el antiguo Ritz, el Husa President Park, localizado en Bruselas, y, precisamente, el Husa Imperial Tarraco, todos establecimientos de cuatro estrellas. El hotel tarraconense fue construido el año 1963 y disponía de 170 habitaciones, repartidas en seis plantas. Después de años de dificultades económicas, el 21 de mayo cerró las puertas. Desde el cierre, la única actividad que se ha mantenido ha sido la generada por el Casino de Tarragona.