Los mossos mantienen que encontraron ADN de Carme Gallart en el vehículo en que se habría trasladado el cadáver

Agentes de la policía científica y del laboratorio de los Mossos D'Esquadra han reafirmado este miércoles en el juicio que se celebra en la Audiencia de Tarragona que encontraron restos biológicos con ADN atribuido a Carme Gallart en el vehículo con que el acusado, Ramon Franch, habría trasladado el cadáver de la mujer. Según los peritos, la muestra obtenida del parachoques posterior del Hyundai Atos era coincidente con el perfil genético conseguido del cepillo de dientes que la familia entregó a la policía. Ante las dudas de la defensa sobre la certeza de estas pruebas de ADN, el agente adscrito al laboratorio ha remarcado que compararon el perfil coincidente con muestras biológicas extraídas, directamente, de los padres y de dos hijos de la desaparecida. El resultado concluyó que había «7.800 trillones» más de probabilidades que la muestra de ADN se correspondiera a Carme Gallart que no lo contrario.

Este miércoles han arrancado las pruebas periciales en el juicio contra el acusado, Ramon Franch, por la muerte de Carme Gallart, la mujer desaparecida en Els Pallaresos (Tarragonès) el 18 de junio del 2015. Agentes de los Mossos D'Esquadra han explicado al jurado popular que el Hyundai Atos se analizó en abril del 2016, diez meses después de la desaparición de Carme Gallart, y que presentaba muy buenas condiciones, aunque tenía más de 15 años.

El vehículo se custodió inmediatamente cuando su propietaria informó de que lo había prestado a su amigo Ramon Franch durante los meses de mayo y junio del 2015. Una vez en la sede central del complejo Egara, la policía científica lo inspeccionó y lo roció con un reactivo orientativo de presencia de sangre que se denomina Bluestar. El producto reaccionó en varias zonas -donante fluorescencia en los restos-, por lo cual los agentes recogieron todas las muestras y las llevaron a analizar.

Después de descartar restos que no ofrecieron ningún perfil genético, la muestra clave resultó la que habían localizado en el parachoques posterior del Hyundai Atos. «Es una parte muy curiosa porque la puerta del maletero cae justamente encima, encaja. La puerta cerrada tapa absolutamente esta zona», ha asegurado el jefe de la inspección ocular. De hecho, el mosso ha detallado que, en caso de que alguien hubiera limpiado el vehículo con la puerta cerrada, ya sea desde el interior o desde el exterior, el resto habría quedado protegido.

Esta muestra, según ha remarcado el agente, era «ínfima», de muy pequeñas dimensiones y no lo habrían detectado a simple vista sin el reactivo. Debido a la poca cantidad de muestra obtenida, priorizaron la obtención de un perfil genético en lugar de realizar una prueba de hemoglobina por confirmar si se trataba de sangre o no. Si lo hubieran priorizado en la inversa, no hubiera quedado bastante muestra para averiguar el ADN. Por lo tanto, eso les ha permitido llegar a la conclusión de que los restos biológicos del coche coinciden con el ADN obtenido del cepillo de dientes de Carme Gallart.

La hija de Gallart entregó este objeto personal a la policía, en el año 2015. Según el agente del laboratorio, sin embargo, como biólogos no pueden afirmar rotundamente que el cepillo correspondiera a Gallart, dado que no ocurre una prueba directa extraída de su cuerpo. Por este motivo, el laboratorio comparó el perfil genético coincidente del vehículo y del cepillo, con el ADN de los familiares. El resultado determinó que la probabilidad de que el perfil genético fuera de Gallart era «tan elevada» que se podía dar por «cierto» que se trataba de ella. Exactamente, era 7.800 trillones de veces más probable que fuera así, según ha insistido el agente.

Durante su intervención, la defensa ha insistido en el hecho de que no se ha confirmado que la muestra fuera de sangre y que el cepillo de dientes lo entregó la familia. El abogado también ha planteado si es posible transferir ADN de otra persona después de haber estado en contacto. «En condiciones normales, no, pero podría haber transferencia si este otra persona tuviera la mano muy sudada, se entra en contacto y se transfieren los restos», ha ejemplarizado el experto del laboratorio de los mossos. El abogado defensor también ha intentado preguntar a este agente sobre los signos que se podrían haber encontrado en el maletero si hubiera ocultado un cuerpo durante dos días, pero el magistrado ha considerado que este no es su campo de valoración.

Este miércoles también han declarado como peritos otros agentes que participaron en la inspección ocular y en la recogida de muestras -fibras y restos biológicos- del Chevrolet y el Audi del acusado, así como del aparcamiento y del garaje de la Bajada del Toro de Tarragona. En resumen, no se encontró ninguna otra muestra con el perfil genético de la víctima, aunque el reactivo Bluestar dio positivo en varias zonas.