La jornada de puertas abiertas del Arqueológico recibe visitantes de todas partes
Una alemana residente en Escocia descubre la potencia de los mosaicos
Es alemana, reside en Escocia con su familia y ayer fue una de las visitantes del Museo Nacional Arqueológico de Tarragona (MNAT), coincidiendo con la celebración de una jornada de puertas abiertas. Barbara Illner aprovecha los cuatro días que pasará en Tarragona para conocer el territorio. «Después –de visitar la sede del MNAT en la plaza del Rey, iremos a Reus», dijo. «Antes, hemos estado en el Anfiteatro y en la villa de los Montones, y también quieren ir a Centelles». Este comentario lo hizo en la sala de los mosaicos y mientras quedaba cautivada por la perfección del conocido como Medusa. Illner no dudó a decir que «de lo que he visto hasta ahora en el museo, lo que más me ha impactado son los mosaicos».
Carlos García, un joven castellonense que iba acompañado de sus padres, salió encantado de la sala del museo donde se visita una exposición dedicada a Centcelles, una muestra que, en el suelo, reproduce las pinturas que se conservan en el techo del edificio de Constantí. La madre explicó que «hemos venido desde Castellón a pasar el día en Tarragona: yo ya había estado, pero hacía mucho tiempo». Los siguientes destinos que los esperaban eran el Anfiteatro y el Puente del Diablo.
Salva de Torres es un tarraconense que «hacía muchos años que no venía al museo». Ayer lo volvió a hacer «aprovechando una visita de unos amigos de Figueres». Las estatuas augustals y su tamaño causaron sensación a los miembros del grupo.