Las obras de la Facultad de Educación empezarán el mes de enero de 2018

Las obras de la nueva Facultad de Ciencias de la Educación y Psicología de la Universidad Rovira i Virgili (URV), que se instalará en el Campus Catalunya tal como se acordó en el Consell de Govern de abril, empezarán el mes de enero del próximo año. Así lo aseguraba el rector de la universidad, Josep Anton Ferré, después del Claustro celebrado el pasado mièrcoles, donde se aprobó una declaración institucional para reclamar, entre otros, acabar con el artículo 155. La URV empezará la construcción del nuevo edificio con recursos propios, pero necesita el cofinanciamiento del 50% de la Generalitat, hecho que no se producirá hasta que «no haya calma institucional y empiecen a llegar las inversiones», según expresó el rector.

El proyecto del nuevo edificio se redactó el año 2010, pero quedó aparcado por culpa de la crisis económica. Ocho años más tarde, el solar ubicado al lado del Campus Catalunya, verá cómo los operarios empiezan a trabajar. La primera fase de las obras, que consisten en el movimiento de tierras, la fundamentación|cimentación y la estructura debajo rasante del edificio del futuro aulario, donde se ubicaría un Aula Magna subterránea –con una superficie de 786 metros cuadrados–, se licitó recientemente. El rector informó de que ya disponen del permiso de obras, que empezarán el mes de enero. Esta primera actuación tiene un presupuesto de 2 millones de euros, que provienen de los recursos de la misma universidad.

Más adelante se construirá el aulario del centro, de planta baja y cinco plantas con un total de 4.520 metros cuadrados, que dará continuidad en el aulario del Campus Catalunya. Se prevé trasladar a la nueva ubicación, en primer lugar, a los estudiantes de las enseñanzas de Mestre. La Universidad dispone de un total de 7 millones de euros por las obras, y necesita el cofinanciamiento de la Generalitat como mínimo del 50%.

Declaración institucional

La aplicación del artículo 155 hace imposible que la Generalitat, a estas alturas, haga la inversión de 7 millones de euros para que el proyecto del nuevo edificio de Ciencias de la Educación y Psicología sea una realidad. Por este motivo, entre otros, el Claustro aprobó con un 83% de los votos una declaración institucional.

La declaración consta de cuatro puntos: el primero urge la retirada de las acciones penales iniciadas contra dirigentes políticos catalanes y representantes de entidades ciudadanas y reclama el inicio de un diálogo sin condiciones previas para encontrar la solución adecuada a un problema político que se arrastra desde hace años; el segundo pide restablecer el funcionamiento ordinario de las instituciones de autogobierno de Cataluña y que se deje de aplicar a Cataluña el artículo 155 de la Constitución; el tercero hace un llamamiento en que todo el mundo participe de forma activa dando apoyo a las candidaturas que mejor representen su opción política en las próximas elecciones en el Parlament de Catalunya; y el cuarto reitera el compromiso del Claustro, expresado en la sesión anterior del 1 de junio de 2017, de defender que Cataluña tiene que poder decidir su futuro en un referéndum de autodeterminación acordado con el Estado español.

«Nos gustaría no tener que volver a votar una declaración como esta hasta de aquí 10 o 15 años», expresó el rector de la URV, quien añadía que «necesitamos calma institucional para que lleguen las inversiones y para poder saber qué haremos durante los próximos cuatro años». Lo cierto es que el 155 se ha notado en la universidad tarraconense. Josep Anton Ferré detallaba que no fue hasta la semana pasada cuando la Generalitat les confirmó la partida para los presupuestos de este año. «Nunca habían llegado tan tarde», decía Ferré sobre unos presupuestos que están congelados desde hace tres años. En este sentido, el rector calificaba de «mala noticia» que el año 2018 los presupuestos sean los mismos y no pasen de los 70 millones de euros, porque «nuestro crecimiento vegetativo nos cuesta unos 500.000 euros cada año, cantidad que los presupuestos no tienen en cuenta».

Modernización y revisión de grados

Por otra parte, durante el Claustro universitario celebrado ayer, también se presentaron los resultados del proceso de revisión de titulaciones de grado, master y doctorado. Ferré explicó que «hay cierta contención de estudios de Grado que hay que modernizar para aumentar la oferta». Hasta ahora se han implantado un grado emergente y tres de reformatos y siete más están en fase de programación para los próximos cursos, como el grado de Informática, que durará tres años.

Con respecto a los estudios de master, está incrementando lentamente el número de alumnos matriculados, el 36% en el periodo 2013-2017. En este ámbito se está trabajando en la programación de master professionalitzadors adecuados al mercado de trabajo. De hecho, ya hay 14 master nuevos, entre emergentes y reformatos, y se han extinguido 9.