El Ayuntamiento de Tarragona eliminará los contenedores soterrados por obsoletos

El Ayuntamiento de Tarragona suprimirá 240 contenedores soterrados y los sustituirá por otros de superficie, once años después de haberlos colocado en varios puntos del centro de la ciudad, donde se encuentran la mayoría, y a los barrios de Ponent, Sant Pere i Sant Pau y Sant Salvador, con participación de los Fondos de Cohesión de la Unión Europea. La medida afecta cerca de 240 contenedores. El motivo del cambio es la finalización del periodo de vida útil y el hecho de que hayan quedado obsoletos, informó el Ayuntamiento en esta redacción.

Por otra parte, a inicios del próximo año la Autoridad Portuaria procederá a la sustitución de los contenedores soterrados existentes al barrio del Serrallo y en el Moll de Costa. En su lugar se pondrán otros de superficie que se consideran más efectivos.

El Ayuntamiento indicó que, además de la obsolescencia de los contenedores soterrados, otros motivos para proceder a su supresión son que, con el paso del tiempo, este sistema es motivo de quejas de vecinos por el ruido que genera la retirada de su contenido a la hora de vaciarlos, además de olores molestos que producen. Además, según puntualizó el gobierno municipal, los ciudadanos confunden, más que otros modelos, cuando proceden a depositar los desperdicios y, en consecuencia, esta acción no se hace en condiciones y perjudica la recogida selectiva.

La primera fase de instalación de islas de contenedores soterrados se llevó a cabo entre en julio del 2006 y en febrero de los 2007. El primer conjunto se ubicó en el barrio de Sant Pere i Sant Pau, hecho que generó gran expectación.

La principal problemática que plantea este sistema es que la parte móvil, de metal, tiene una vida relativamente corta, de aproximadamente diez años, tanto por el paso del tiempo como por la degradación del material con los cuales están construidos. El mes de julio del 2016 el Ayuntamiento informó de que los técnicos municipales valoraron dos posibilidades: reponer los contenedores o eliminarlos. Finalmente, se ha optado por la segunda de las opciones. Además de proceder a su retirada, los agujeros, de tres metros de profundidad, serán rellenados con hormigón.

De las 95 islas de contenedores que se construyeron en la primera fase, 61 están localizadas en el centro de la ciudad, 24 se encuentran en los barrios de Ponent, 6 a Sant Pere i Sant Pau y 4 en Sant Salvador. Aunque el Ayuntamiento no lo especificó, las islas construidas posteriormente, pero que ya han llegado a una edad adulta, también podrían ser desmantelados en los próximos meses. La construcción de las 95 primeras islas tuvieron un coste de 7.118.071 millones de euros. Esta cuantía fue financiada al 80% con los Fondos de Cohesión de la Unión Europea y el otro 20% por el Ayuntamiento, que ahora tendrá que hacer una importante inversión económica para sustituir los contenedores soterrados por los nuevos.