Religión
La capilla de los mormones de Doctor Mallafré se ofrecerá a entidades ciudadanas
Los tarraconenses podrán investigar su línea genealógica, un ámbito en el cual esta iglesia es experta y dispone de unos de los mejores archivos del mundo
La Iglesia de Jesucrist dels Sants dels Últims Dies, conocida popular como iglesia mormona, ofrecerá a las entidades cívicas tarraconenses la capilla que construye en la esquina de la calle Doctor Mallafré con Ramon Nin, donde los ciudadanos también podrán investigar su línea genealógica, campo de la que es una auténtica experta. La primera piedra de la capilla se puso el pasado 14 de octubre, en un acto que contó con la presencia del obispo de la zona de Tarragona, Francisco Martínez Navarro, y la previsión es que la obra haya acabado a finales del próximo año y poder inaugurar el edificio durante el primer trimestre del 2019. La comunidad mormona de la ciudad de Tarragona cuenta actualmente con 711 miembros inscritos y registrados.
El Centro de Estaca de Tarragona, como lo denominan los mormones, dispondrá de cinco plantas. Dos serán subterráneas y se dedicarán a aparcamiento de vehículos, con capacidad para 49 coches –más una veintena de eventuales en la zona de patio-jardín–, de las que siete serán adaptadas, mientras que las tres exteriores se destinarán tanto a las actividades de la iglesia como las puedan organizar entidades ciudadanas, siempre que no sean con ánimo de lucro, informó a esta redacción Marta Fernández, responsable de comunicación de los mormones en Tarragona. Fernández añadió que «cualquier entidad u organización que haga uso de las instalaciones de la nueva capilla no podrá hacerlo con finalidades comerciales o propagandísticas, ni cobrar una entrada ni ninguna cantidad bajo ningún concepto».
Fernández explicó que la primera de las tres plantas que se verán desde la calle se dedicará a despachos y será el puesto de trabajo del obispo. También será donde estará la pila bautismal. En la segunda, se habilitará la sala de lectura sacramental y su altura será el doble que la de las otras plantas para acoger actividades de culto destinadas a los fieles, mientras que la tercera dispondrá de espacio por impatir clases y organizar iniciativas destinadas a los niños. El solar de Doctor Mallafré cubre una superficie de 1.925 metros cuadrados, de los cuales 580 estarán ocupados, y la superficie total construida será de 3.803 metros cuadrados. El objetivo de esta iniciativa es poder tener un protagonismo mayor en el contexto de la ciudad de Tarragona y establecer más vínculos.
Actividades sociales
Marta Fernández explicó que la capilla de Tarragona dispondrá de salas donde llevar a cabo las actividades de carácter social y solidario que hace la Iglesia de Jesucrist dels Sants dels Últims Dies, como «la confección de mantas que entregamos a centros de acogida de mujeres maltratadas o de los conocidos como Coixins del Cor que utilizan mujeres que han sido intervenidas en el pecho, proceder a la recogida de alimentos u organizar donaciones de sangre». «Queremos ser útiles y hacer cosas que están en nuestras manos, y realizar proyectos que puedan cubrir necesidades de otras entidades, ONG's e, incluso, del Ayuntamiento», subrayó la responsable de comunicación.
Fernández insistió en decir que el centro que los mormones abrirá en Tarragona «podrá ser utilizado por entidades de la ciudad, siempre sin ánimo de lucro», y puso como ejemplo un coro de música que necesite el espacio para llevar a cabo los ensayos o hacer exposiciones fotográficas o de pintura. Es por este motivo que el diseño del edificio de Doctor Mallafré contempla «espacios polivalentes».
Por otra parte, Fernández informó de que, en el ámbito estrictamente religioso, las capillas mormonas «son muy sobrias, no tienen imágenes». Además, el centro de reuniones de Tarragona tendrá capacidad para acoger a cerca de 800 personas, ya que en el salón sacramental se harán actos donde también podrán asistir miembros de esta iglesia de otras zonas como Tortosa o Barcelona.
Línea genealógica
Desde hace años, los mormones tienen un gran interés por la genealogía. De hecho, bajo la presidencia del Ayuntamiento de Tarragona del alcalde Joan Miquel Nadal se firmó un acuerdo para microfilmar los ascendientes de los tarraconenses. Marta Fernández informó de que la capilla de la ciudad, ubicada actualmente en la calle Marqués de Montoliu, dispone de un centro vinculado a la historia familiar. «Tenemos miembros que ayudan a otras personas a investigar su línea genealógica, un servicio que hacen especialistas y que es gratuito». «Tenemos registros de todo el mundo», remarcó Fernández.
El archivo de la Iglesia de Jesucrist dels Sants dels Últims Dies se encuentra en el interior de una montaña excavada, situada en el cañón Little Cottonwood, en el Estado de Utah (Estados Unidos). En este espectacular espacio, los mormones, guardan una de las colecciones más grandes de registros genealógicos que existen, aprovechando la red de túneles que se adentran cerca de 210 metros hacia el interior de la montaña, donde se almacenan millones de rollos de microfilm. Uno de los compromisos adquiridos por los mormones es que la información tiene que ser de personas que ya han muerto.
Primeros mormones tarraconenses
El 28 de junio de 1979 llegaron a Tarragona los primeros misioneros de la Iglesia de Jesucrist dels Sants dels Últims Dies con el objetivo de predicar el Evangelio. Howe y Gardner iniciaron su trayectoria en la ciudad acudiendo a la Muralla, donde ofrecieron «una oración para bendecir Tarragona y sus habitantes con el fin de prepararlos para escuchar el evangelio de Jesucristo», segundo recoge la historia de esta iglesia.
El 23 de septiembre de este año se llevan a cabo los primeros bautismos: el matrimonio Cartanyà-Mestric y sus hijas Rosa y Margot se bautizan en el mar y se convierten así en la primera familia de los Sants dels Últims Dies de Tarragona. Poco después, se bautizan miembros de la familia Moret, y el 27 de octubre de 1979 pasan por las aguas del bautismo, de nuevo en la playa de la Arrabassada como marco, la familia Prada–Pino y dos de sus hijos: Julio y Carme.
Por aquellas fechas, los mormones empiezan a predicar en Reus y Vila-seca, y se hacen las primeras reuniones en el piso donde viven los misioneros. El primer local en la ciudad de Tarragona eran unos pequeños bajos ubicados en la avenida de Andorra. El aumento del número de miembros decidió el traslado del local en la avenida Marqués de Montoliu, que es la que ocupan actualmente. La de Doctor Mallafré será la tercera sede en la ciudad.