Ponerse en la cabeza el espíritu gladiador y alocado de Tarracvs
El merchandising de los Juegos Mediterráneos ha hecho una apuesta por la originalidad con el Crazy Hat
Son muchos los elementos que han hecho de Tarracvs, la mascota de los Juegos Mediterráneos Tarragona 2018, un muñeco único que no deja indiferente a nadie. Uno de estos elementos es el casco de gladiador que lleva y que lo vincula con el glorioso pasado romano de la ciudad. A partir de ahora, este casco no sólo vestirá la cabeza de Tarracvs, sino que lo hará de todo aquel que se lleve a casa el Crazy Hat. La empresa Expolicencias, que tiene la licencia para elaborar el merchandising de los Juegos y que ha sido la creadora del peluche de la mascota, ha diseñado ahora un sombrero que recrea el que viste el muñeco.
«Con el merchandising de Tarragona 2018, queríamos hacer alguna cosa original, que no fuera sólo los típicos objetos de siempre», comenta Clara Ferragut de Expolicencias. Así fue como surgió la idea de elaborar un sombrero que recreara el de Tarracvs y que los espectadores pudieran llevar durante los Juegos. El resultado final es un sombrero hecho de poliéster con un acabado peludo como el de un peluche, que lo hace confortable y divertido a partes iguales. Este toque alocado y fuera de toda convención en el mundo del merchandising le ha valido el nombre de Crazy Hat —sombrero loco en inglés. Desde hace ya unos días se puede adquirir en la web www.tarragona2018shop.com, en dos tamaños, una para adulto y la otra para niño. Si se recoje en las oficinas de Diari Més, tiene un precio de de 12,90 euros. Pagando 4 euros más, se hace un envío a domicilio.
Goma eva o peluche
El proceso para llegar al Crazy Hat ha pasado por varias fases hasta llegar al diseño final. En un primer momento, la idea de Expolicencias era la de fabricar un sombrero de goma eva, que se vendería desmontado y que los consumidores montarían en casa, gracias a un conjunto de lengüetas que se encabalgarían. Esta primera idea, sin embargo, tenía un riesgo importante. Y es que no siempre resulta fácil el montaje de este tipo de sombreros, especialmente de aquellos que cuentan con muchas piezas, como es el caso de Tarracvs. Aunque se hizo un prototipo para comprobar cuál sería el resultado final de esta primera idea, Expolicencias la acabó desestimando.
Ahora bien, en aquel momento, la empresa estaba desarrollando también el peluche de Tarracvs. De manera que propuso al fabricante la posibilidad de confeccionar una reproducción del casco a medida humana y con retoques para hacerlo adaptable y confortable a la hora de llevarlo puesto. El resultado ya se puede adquirir y seguro que adornará la cabeza de todos aquellos pequeños y mayores que quieran vivir de una forma divertida los Juegos Mediterráneos.