El Carnaval de Tarragona dice adiós con mucha sátira, chispas y lágrimas de duelo
El testamento del Carnaval tuvo como protagonista la política municipal y nacional
El Carnaval de Tarragona acabó anoche con el tradicional entierro del Rey Carnaval y la crema del Muñeco, la Ninota y la Bota en la plaza de la Fuente. Instantes antes, Lucifer, el notario real, leyó el testamento de la Concubina, que tuvo como protagonistas la política municipal y nacional, el artículo 155 o la cultura en la ciudad. Además, se anunciaron las comparsas ganadoras. La primera clasificada fue la de la Escuela de Baile Nuevo Ritmo, con la temática Skadi, la diosa del invierno, mientras que el segundo lugar fue por Cromatic Fusions, con El guardián del zodíaco y su diosa.
El testamento del rey Carnestoltes, que fue leído por el notario real, Lucifer, tuvo como protagonistas la política municipal y nacional. Así pues, el alcalde Ballesteros, el artículo 155, el despliegue policial en Cataluña o las elecciones del 21 de diciembre tomaron protagonismo.
El entierro del Rey Carnaval, sin embargo, empezó en la plaza de las Coles, donde se entregó el testamento de la Concubina al notario real. Desde allí, y con la compañía de los elementos de fuego, los grupos se dirigieron a la plaza de la Fuente, recuperando de esta manera la presencia de las chispas durante el recorrido. El Baile de Diablos de Tarragona, el Dragón, el Buey, la Víbria, el Grifo y el Grupo Diables Voramar del Serrallo fueron los encargados de poner en marcha las carretilles y quemar el Muñeco, la Ninota y la Bota.
El carnaval tarraconense dijo adiós después de más de una semana de juerga y desenfreno, que han tenido como acontecimientos primordiales el Disfraz de Oro, el Desfile de la Artesanía y la de Lucimiento, además de las diversas fiestas organizadas por las entidades.