Estrada se apunta una «pequeña victoria» y su cese se decidirá en 15 días

El cese de la concejala de la CUP, Laia Estrada, por su condena en el caso Bershka, se decidirá en quince días. Así lo ha anunciado este lunes el alcalde Josep Fèlix Ballesteros en las postrimerías del plenario municipal. Durante estas dos semanas, la CUP tendrá tiempo para presentar alegaciones e intentar conseguir, así, que Estrada mantenga su sitio como concejala electo. La mismo Estrada valoraba la decisión del equipo de gobierno como una «pequeña victoria» y cuestionaba la firmeza de su medida. «Ni ellos lo tienen claro», decía Estrada en relación a las discrepancias jurídicas sobre su compatibilidad en el cargo. La portavoz de la CUP ha contado con el apoyo de decenas de personas que han llegado al Palau Municipal con carteles de «fuera mafia» y gritos de «Ballesteros dimisión», clima de tensión que ha marcado el consejo plenario, parándolo en varias ocasiones.

Laia Estrada seguirá siendo concejala de la CUP en el Ayuntamiento de Tarragona al menos dos semanas más. En el último punto del consejo plenario celebrado el lunes por la mañana y a través de una propuesta de la alcaldía, la portavoz de los anticapitalistas tenía que ser cesada por su condena en el caso Bershka. Según la sentencia, Estrada tendrá que cumplir tres meses de prisión o asumir una multa que computaría la pena. Eso es, según el secretario municipal Joan Anton Font, un motivo de incompatibilidad con su cargo de concejala. Así lo manifestaba en el informe que elaboró a demanda del otro concejal cupaire, Jordi Martí.

Decenas de personas han asistido al Ayuntamiento para dar apoyo a Estrada. Carteles de «fuera mafia» y gritos de «Ballesteros dimisión» o «esta es su democracia» han hecho acto de presencia en el Salón de Plenos, donde no cabía ni un alfiler. De hecho, un grupo muy numeroso de personas se ha tenido que quedar fuera de la sala porque, según fuentes municipales han informado en aquel momento de que, «no hay más sillas». El clima de tensión se ha empezado a gestar con la llegada de los primeros manifestantes, que esperaban en las puertas del salón y no han tardado al hacerse oír. El volumen de las protestas ha subido y las recriminaciones a los miembros del equipo de gobierno han sido constantes. Por este motivo, Ballesteros ha parado el consejo plenario en varias ocasiones.

El de Estrada era el último punto del día. Así pues, en las postrimerías del pleno, el alcalde Ballesteros ha anunciado el siguiente: «La propuesta de alcaldía sobre el cese de Laia Estrada quedará sobre la mesa durante quince días». Este es el tiempo que los anticapitalistas tendrán para presentar alegaciones y evitar, de esta manera, que la portavoz de la CUP sea cesada. Tan pronto como Ballesteros ha anunciado el aplazamiento, Estrada ha salido del salón de plenos acompañada de Jordi Martí. Ha sido entonces cuando los manifestantes han vuelto a subir la voz para darle apoyo. La respuesta del alcalde a los gritos de los manifestantes ha sido ordenar a dos agentes de la Guardia Urbana que cerraran la puerta del Salón.

Minutos después, durante el turno de Precs i Preguntes, Martí ha tenido un breve pero intenso debate con el alcalde, quien ha recriminado al concejal cupaire que se dirigiera al secretario de la siguiente manera: «Señor Font, deje de jugar y de tomar el pelo a esta ciudad». Martí, después de discutir con el alcalde, también ha salido del Salón de Plenos.

«La CUP está con Laia»

Al acabar el plenario, Estrada ha comparecido ante los medios de comunicación en las puertas del Ayuntamiento. Lo ha hecho acompañada del diputado de la CUP en el Parlamento, Vidal Aragonés, y del también cupaire Eduardo Cáliz. Aragonés ha asegurado que Estrada «fue injustamente condenada por una acción que expresaba el feminismo de clase y, aprovechando esta circunstancia, con el apoyo incontestable de un informe infame del secretario general, están intentando echarla y acabar con las mínimas expresiones democráticas». Por su parte, Cáliz, miembro del secretariado nacional, ha transmitido el «total apoyo» de la CUP hacia la concejala tarraconense. «Es un verdadero ataque democrático y un intento de silenciar a los concejales que más molestan y plantan cara» , ha dicho Cáliz sobre Estrada y Martí. En 15 días se sabrá si las alegaciones han prosperado.