El comité de la EMT califica de «peligrosa» la parada intermedia

El comité de empresa de la EMT de Tarragona critica con dureza las formas de aplicación de la parada intermedia, una propuesta que creen que «no se ajusta al protocolo de seguridad vigente» y que, por lo tanto, es «peligrosa». La parada intermedia es una nueva medida destinada a las mujeres y que les permitirá bajar entre dos paradas a las líneas 71, 72 y 73 del TGNIT. Se empezó a aplicar el viernes pasado y, según informaban desde el comité, «nos enteramos de la medida gracias a los medios de comunicación».

«El reglamento de transporte de viajeros, la ley de ordenación del transporte terrestre y, especialmente, el reglamento de transporte urbano de Tarragona, manifiestan claramente el rechazo a abrir las puertas fuera de las paradas establecidas», aseguraban desde el comité. Por este motivo, el protocolo de seguridad para los trabajadores y las usuarias quedaría sin validez. «Otros ayuntamientos quieren implantar esta medida, pero sigue en estudio y evaluación frente problems jurídicos, de seguridad y de los seguros de los viajeros», apuntaban.

Los trabajadores de la empresa municipal, especialmente los conductores, se sintieron «desinformados», porque no conocieron la aplicación de la medida hasta que apareció a los medios de comunicación. «Begoña Floria se reunió con nosotros el 16 de febrero y no nos informó de nada», añadían. Es por este motivo que cuestionan la «celeridad» con la que se ha aplicado la nueva normativa, con la que dicen estar «totalmente de acuerdo», siempre y cuando «se consensúe con todas las partes y se den suficientes garantías a usuarias y trabajadores». Sin embargo, proponían que las stop-parada que se han aplicado en Tarragona –la usuaria baja entre paradas de una línea cuando avisa al conductor– se cambien por paradas fijas entre dos paradas . «Otros ayuntamientos y entidades lo ven más viable», apuntaban.

Por otra parte, desde el comité también criticaban la dejadez del servicio y las condiciones laborales de los trabajadores. «¿Qué seguridad se le da al conductor y a la usuaria sin tener las emisoras y las herramientas de comunicación en condiciones? ¿Seguiremos utilizando nuestros teléfonos personales¿», se preguntaban. Además, reclamaban una coordinación con la Guardia Urbana con el objetivo de dotar de más seguridad esta iniciativa, que busca proteger a las mujeres de agresiones sexuales durante la noche.

En último término, el comité reclama que la nueva normativa se trabaje y que se llegue a un consenso entre todas las partes implicadas.